Este país es líder en energías renovables: abastece 100% su consumo interno y exporta a Argentina
Las inversiones en energía eólica, solar, biomasa e hidroeléctrica que desarrolló Uruguay a través de un esquema de incentivos institucionalizados por los distintos gobiernos que se sucedieron en Uruguay están dando sus frutos.
Energía limpia
Según datos de la Administración del Mercado Eléctrico (ADME) reflejaban que el 100% de la operación del 1 de julio estaba siendo abastecida con fuentes limpias de generación. El 68% lo aportó la tecnología eólica, el gran caballito de batalla del sistema, gracias a los vientos que recibe el país costero.
El 28% fue inyectado por la generación hidráulica y un 4% la biomasa, brindando seguridad y potencia firme a las operaciones. Cabe destacar que no se necesitó insumir energía eléctrica de las centrales térmicas instaladas, menos aún importar de otros países. La fotovoltaica, dada la temprana hora de la mañana, no fue protagonista en el total de generación.
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Exportar energía
Exactamente a las 7.12 horas, la demanda del país era de 1312 MW, bastante por debajo las posibilidades de generación. Esto permitió exportar 499 MW a precios competitivos a Argentina, lo que significó un 38% del producido.
Uruguay ocupa el tercer lugar a nivel mundial en relación con el nivel de inversiones de energías renovables y su porcentaje sobre el producto interno bruto, informó el sitio Energiaestrategica.
Edenor y Edesur polémicas
Mientras tanto las casi seis millones de facturas que Edesur y Edenor emiten por mes quedaron en medio de una polémica por la forma en que ambas distribuidoras deben calcular el consumo de cada uno de sus usuarios de Capital Federal y el Gran Buenos Aires (GBA).
El aislamiento obligatorio que cumple el personal que habitualmente recorre los hogares para tomar los cálculos de los medidores dejó al descubierto las deficiencias que posee este mecanismo y plantea la necesidad de modernizar el control del consumo eléctrico.
De hecho, la falta de un sistema inteligente que compute el uso de energía llevó al Gobierno a tomar medidas para obligarlas a que realicen la estimación del gasto de usuarios residenciales.
Para ello, se utiliza el menor registro de consumo correspondiente al mismo período de estimación de los últimos tres años (2017, 2018 y 2019) hasta que se reestablezca la actividad de lectura.
Ocurre que los «lecturistas» deben cumplir con el aislamiento, al menos en el ámbito de alcance del servicio de ambas concesionarias del servicio eléctrico, ya que la situación no se replica con el resto de las distribuidoras que operan en otras regiones del país, habilitadas a llevar a cabo esa tarea y enviar las facturas con el costo exacto del consumo correspondiente al período en curso.
Por ese motivo, la fórmula «a ojo» tendrá vigencia hasta que se normalicen las tareas de medición, ahora limitadas. El objetivo, según el Ejecutivo, es «proteger los derechos de los usuarios y usuarias, brindando certeza ante los problemas de facturación generados por las empresas distribuidoras» durante la cuarentena.
Sin embargo, gran cantidad de facturas que llegaron a hogares y empresas ha causado preocupación por el formato de «consumo estimado» que las dos distribuidoras están tomando en cuenta.
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