Dos argentinos fundaron la primera cooperativa sustentable que elabora productos hechos de pelo
Julián Osuna y Mariano Suárez instalaron en Quilmes, provincia de Buenos Aires, un taller que elabora productos amigables con el medioambiente.
La economía circular emerge como una de las industrias más innovadoras y en crecimiento en la actualidad, enfocada en reducir el desperdicio y maximizar la eficiencia en el uso de recursos naturales. En este contexto, Julián Osuna y Mariano Suárez lideran Mot Argentina, una cooperativa ubicada en el partido de Quilmes que fabrica productos respetuosos con el medioambiente utilizando pelo reciclado de peluquerías.
Para entender los orígenes de este emprendimiento, es necesario retroceder hasta 2021, cuando Julián estudiaba Ingeniería Industrial en la Universidad Argentina de la Empresa (UADE). En aquel entonces, el joven se sumergía en una investigación para su tesis de grado sobre los diversos usos y propiedades del cabello humano, así como su potencial contribución a la preservación del medio ambiente. Fue entonces cuando se topó con Mot Chile, una organización experta en la creación de productos circulares a partir de residuos, incluyendo el cabello.
No obstante, la relación con esta empresa trascendió lo meramente académico, cuando le ofrecieron la oportunidad de unirse a su red y establecer su propia sucursal en Argentina. Sin titubear, Julián se lanzó a esta aventura y, junto a su socio y amigo Mariano Suárez, fundaron la primera organización en Argentina dedicada a la fabricación de productos sostenibles a partir de cabello humano.
Desde 2021, Mot Argentina funciona como una cooperativa de trabajo, compuesta por un equipo interdisciplinario que no solo se ocupa de la producción de materiales derivados del reciclaje de cabello, sino que también se dedica a educar a través de capacitaciones y redes sociales sobre la importancia del cuidado del medio ambiente mediante la gestión de residuos.
Qué productos comercializa Mot Argentina
El taller elabora dos líneas de productos: Agropelo y Petropelo. El primero de ellos consiste en discos o planchas elaboradas al 100% de cabello, diseñadas para su uso tanto en cultivos a gran escala como en la jardinería doméstica. Agropelo no potencia un 20% el crecimiento de las plantas, sino también ahorra hasta un 48% de agua. Este producto ecológico viene en cuatro presentaciones: discos de 15, 20 o 30 centímetros, y una plancha de 60 por 60 centímetros.
En este sentido, Agropelo se inscribe dentro del mulching, una técnica agrícola y de jardinería que consiste en cubrir el suelo alrededor de las plantas con un material orgánico o inorgánico, en este caso, el pelo humano. El objetivo principal del mulching es conservar la humedad del suelo, regular la temperatura del suelo y potenciar la fertilidad del mismo.
“Es un disco que va abrazando el tallo de la planta y va por encima de la tierra. Esto permite evitar la evaporación del agua, pero también, a partir de las propiedades y los componentes del pelo, como del nitrógeno, tiene capacidad para mejorar el perfil de los suelos”, explicó Julián Osuna, en diálogo con Infocielo.
Por otro lado, el Petropelo aprovecha la capacidad del pelo de engrasarse y absorber aceites y grasas, utilizándose para disminuir el impacto negativo de hidrocarburos tanto en el agua como en el suelo. En sus dos presentaciones, ya sea como cilindro o como plancha, el producto puede ser utilizado en espejos de agua, muelles públicos y privados, así como en grandes industrias que arrojan solventes y combustibles, o que requieren sistemas de contención de derrames.
“Hay experimentaciones muy interesantes que comparan el uso del pelo y los otros productos que se utilizan para la recuperación de esos hidrocarburos. El Petropelo ser utilizado en un espejo de agua o en una industria que necesite barreras de contención de hidrocarburos, como muchas normas así lo indican”, detalló.
A su vez, Osuna describió: “El pelo tiene una capacidad muy interesante de absorción de hidrocarburos. Así que usamos esa propiedad y con un kilo de pelo podemos absorber entre 5 y 8 kilos de hidrocarburos”.
La economía circular y una mirada sustentable sobre el presente
Es innegable que el planeta nos pide a gritos que lo protejamos y que llevemos adelante acciones para preservarlo y reducir al mínimo nuestro el impacto negativo en la naturaleza. Desde esta perspectiva, Mot Argentina se inscribe dentro de la industria sustentable y amigable con el medioambiente.
“No solo que expandimos la frontera de lo reciclable, sino que permitimos que ese residuo que antes terminaba a un relleno sanitario, con su consecuente viaje con emisiones e impacto en el medioambiente. Nosotros lo sacamos de ese circuito y lo refundacionamos de alguna manera”, aseguró Julián.
“Hay un segmento del público que es mucho más consciente de los procesos productivos y de los impactos ambientales. Hay un mercado muy interesante en ese sentido. Estamos en un ecosistema donde participamos nosotros y participan las peluquerías. Además, ayudamos a que esas peluquerías hoy tengan la capacidad contar que están reciclando, mostrarlo socialmente y, tranquilamente, tener un impacto positivo en sus ventas. Esto también nos obliga a cuestionarnos un poco a nosotros como productores en general de residuos”, concluyó.
Fuente: InfoCielo