China presentó una máquina gigante con “tecnología verde” que busca mayor conectividad
La perforadora de túneles "Jianghai" marca un hito de ingeniería en la construcción del proyecto subacuático del Río Yangtze.
China puso en marcha una imponente perforadora diseñada para excavar bajo el lecho del río Yangtze, el más largo del país. El ambicioso objetivo del proyecto es construir el túnel subacuático más largo del mundo utilizando esta tecnología, y fortalecer así la conectividad en una de las regiones más dinámicas y prósperas de Asia.
La gigantesca máquina, bautizada como «Jianghai», destaca por sus impresionantes dimensiones: mide 145 metros de largo, tiene un diámetro de excavación de 16,6 metros y pesa alrededor de 5.000 toneladas. Este coloso de la ingeniería será clave en la construcción del Túnel Haitai del Río Yangtze, una infraestructura estratégica que conectará las ciudades de Haimen y Taicang, en la provincia de Jiangsu.
El proyecto se enfrenta a desafíos técnicos significativos, debido a la complejidad del terreno bajo el río. Según explicó You Shaoqiang, ingeniero jefe de la obra, el túnel deberá atravesar capas de limo y arena fina, alcanzando una profundidad de hasta 75 metros.
«Estas duras condiciones hacen que el proceso de construcción sea extraordinariamente desafiante», manifestó You. La presión a esa profundidad equivale a 75 toneladas por metro cuadrado, lo que requirió el desarrollo de tecnologías específicas para garantizar el avance seguro de la perforación.
La perforadora «Jianghai» está equipada con tecnología de última generación, incluyendo un cabezal de corte equilibrado por presión y un sistema de monitoreo inteligente. Este sistema permite supervisar en tiempo real el desgaste del cabezal y facilita reparaciones directamente desde la cabina de trabajo submarina, según explicó Meng Defeng, gerente responsable de la máquina perforadora en el proyecto.
Otra innovación clave es el sistema de doble inyección de lodo, diseñado para aumentar la eficiencia durante la excavación bajo el lecho del río. Esta tecnología mejora el rendimiento general de la máquina al enfrentar las condiciones geológicas complejas del entorno sumergido.
Con la seguridad como prioridad, el equipo de ingenieros implementó varias medidas preventivas para la fase operativa del túnel. Entre ellas se destaca un sistema segmentado de extracción de humo, que ayudará a mitigar riesgos de incendio, según detalló Chen Junwei, gerente del proyecto.
«El túnel presume características pioneras en diseño estructural, prevención de desastres, equipamiento, tecnología verde y sistemas inteligentes», afirmó Chen.
Según las proyecciones oficiales, el túnel estará terminado en 2028. El ingeniero jefe You Shaoqiang destacó que esta obra «tendrá un papel clave en impulsar la integración regional en el Delta del Río Yangtze».
La infraestructura está pensada para aportar «un impulso significativo al desarrollo de alta calidad del grupo de ciudades de clase mundial que conforman esta región», añadió. El Delta del Río Yangtze es una de las zonas más activas y estratégicas en términos económicos dentro de China.
Una vez finalizado, el túnel se convertirá en un eje fundamental para mejorar la conectividad en el delta, facilitando tanto el intercambio comercial como la movilidad entre dos importantes centros urbanos de la provincia de Jiangsu.