Bloquearán la vista al Monte Fuji para evitar a los turistas poco ambientales
Los residentes explicaron que los visitantes suelen alterar el tránsito, arrojar basura y hasta invadir propiedades privadas.
La ciudad de Fujikawaguchiko, en Japón, anunció recientemente una medida que sorprendió a muchos. A pesar de ser conocida por ofrecer vistas privilegiadas del famoso monte Fuji, las autoridades iniciaron la construcción de una gran pantalla negra para bloquear dichas vistas.
Vecinos explican que esta decisión se debe a la gran cantidad de visitantes extranjeros que no respetan las normas locales y afectan la vida en la ciudad.
“Si bien Fujikawaguchiko depende del turismo y da la bienvenida a muchos visitantes, también hay preocupaciones sobre su comportamiento”, explicó Michie Motomochi, propietaria de una tradicional cafetería cerca de uno de los puntos de vista más afectados por esta medida.
La residente señaló que entre las conductas más comunes y molestas de los visitantes se encuentran arrojar basura en cualquier lugar, cruzar las calles con mucho tráfico sin respetar los semáforos e incluso invadir propiedades privadas.
Yoshihiko Ogawa, propietario de una tienda de arroz con más de 50 años de antigüedad en la ciudad, también expresó su preocupación por el aumento del turismo, especialmente en los últimos meses, con personas transitando por las calles y generando ruido en todo momento.
“Nunca imaginamos enfrentarnos a esta situación. Supongo que todos tendremos que adaptarnos”, comentó.
Sin embargo, esta situación no es reciente. Fujikawaguchiko solía ser un lugar tranquilo hasta hace aproximadamente dos años, cuando un usuario compartió una imagen tomada desde un ángulo particular que daba la ilusión de estar sentado encima de una tienda, con el monte de fondo. Desde entonces, no dejó de recibir visitantes de todo el mundo que desean capturar una fotografía en esta pequeña área de la ciudad.
Motomochi señaló que el 80% de sus clientes son extranjeros, una cifra que ha ido en aumento en los últimos años, especialmente desde que se levantaron las restricciones por el coronavirus.
En el pasado, la ciudad intentó abordar el aumento del turismo de manera amigable, buscando conciliar el flujo de visitantes con la comodidad de los residentes.
Por ejemplo, se colocaron carteles en inglés, chino, tailandés y coreano con instrucciones como “no correr por la calzada” o alentando a los visitantes a utilizar los cruces peatonales designados. También se intentó contratar a un guardia de seguridad para controlar las multitudes. Sin embargo, ninguna de estas medidas fue efectiva.
Ante esta situación, las autoridades japonesas no tuvieron más opción que bloquear la vista en esta área de la vía con una malla negra de 2,5 metros de altura y 20 metros de longitud. Se espera que la construcción finalice a mediados de mayo.
A pesar del inicio de estas obras y del cielo nublado que ocultaba la vista del monte, numerosos turistas acudieron al lugar para tomar fotografías este martes. Al enterarse de los planes, algunos expresaron su descontento con la iniciativa.
“Es una solución demasiado grande para un tema que no es tan grande, aunque los turistas estén causando problemas. No me parece bien”, comentó Anthony Hok, un joven francés de 26 años que, en su lugar, sugirió poner barreras al costado de la carretera para preservar la seguridad de las personas.
En cambio, otros como la británica Helen Pull, de 34 años, fue más comprensiva con la situación de los locales dado que el turismo “realmente se ha disparado aquí”.
“Entiendo que la gente que vive y trabaja aquí quiera hacer algo al respecto”, señaló mientras otros comentaron no estar del todo seguros en la efectividad de la medida.
Fuente: con información de AP