Alimentos: ¿hacia dónde van el consumo y la producción?
El uso de la tierra llegó a extremos en que es necesario plantear un nuevo paradigma. La agricultura intensiva, los desmontes para ganar terrenos para el monocultivo de la soja, los cambios en los ecosistemas, las emisiones de carbono, son temás que están en la discusión científica a la hora de plnatear escenarios a causa de la crisis climática y socioambiental que vive el planeta.
En tal sentido, la activista sueca Greta Thunberg, que tiene una gran prédica en los jóvenes de todo el planeta, puso en cuestión la necesidad de cambiar la manera en que se producen y consumen alimentos, para reducir las emisiones de carbono que provocan el calentamieto global, y sus consecuencias: las apariciones de nuevas pandemias como la del coronavirus.
“Nuestra relación con la naturaleza está rota. Pero las relaciones pueden cambiar”, dijo Thunberg en un video emitido el sábado por sus redes sociales, en el Día Internacional de la Diversidad Biológica.
“La crisis climática, la crisis ecológica y la crisis sanitaria están interrelacionadas”, señaló.
El planteo de Greta Thunberg tiene consonancia con lo que vienen señalando los científicos de la Plataforma Intergubernamental Científico-normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPES, sus siglas en inglés), en su último reporte de 2019 sobre el uso de la tierra.
Este organismo estableción que: “Se predice que para el año 2050, la combinación de la degradación del suelo y el cambio climático reducirá los rendimientos globales de los cultivos en un 10% como promedio y en hasta un 50% en algunas regiones. En el futuro, la mayor parte de la degradación ocurrirá en América Central, América del Sur, África subsahariana y Asia; las áreas a las que le quedan la mayor cantidad de tierra adecuada para la agricultura”.
Panorama difícil en las economías
Según el informe del IPBES: “La rápida expansión y el manejo no sostenible de las tierras de cultivo y tierras de pastoreo es el factor directo global de degradación del suelo más extenso, causando la pérdida significativa de la diversidad biológica y servicios de los ecosistemas —seguridad alimentaria, purificación del agua, provisión de energía y otras contribuciones de la naturaleza que son esenciales para las personas. Esto ha llegado a niveles “críticos” en muchas partes del mundo” .
Esto tendrá consecuencias negativas en 3200 millones de personas. “La degradación de la superficie terrestre de la Tierra a través de las actividades del hombre está empujando al planeta hacia la sexta extinción masiva de especies”, afirmó el Profesor Robert Scholes (Sudáfrica), copresidente de la evaluación con el Dr. Luca Montanarella (Italia).
“Evitar, reducir y revertir este problema, además de restaurar el suelo degradado, es una prioridad urgente para proteger la diversidad biológica y servicios de los ecosistemas vitales para toda vida sobre la Tierra y para garantizar el bienestar humano”.
Los autores de este informe, que conforman 129 estados miembros, señalaron que los factores que impulsan la degradación del suelo son los estilos de vida de alto consumo en las economías más desarrolladas, combinados con el aumento del consumo en las economías menos desarrolladas y emergentes.
Es decir, que el consumo per cápita alto y en aumento, intensificado por el crecimiento continuo de la población en muchas partes del mundo, puede llevar a niveles insostenibles de expansión agrícola, extracción mineral y de recursos naturales y urbanización, generalmente ocasionando mayores niveles de degradación del suelo.
“La degradación del suelo, la pérdida de la diversidad biológica y el cambio climático son tres caras distintas del mismo desafío central: el impacto cada vez más peligroso de nuestras elecciones sobre la salud de nuestro ambiente natural. No podemos permitirnos enfrentar ninguna de estas tres amenazas de manera aislada; cada una de ellas amerita ser la política de más alta prioridad y deben abordarse conjuntamente”, dijo Robert Watson, presidente de la organización intergubernamental.
La advertencia se adelantó en unos meses a la pandemia del coronavirus que comenzaría, al menos oficialmente, en diciembre de 2019.
Qué pasa en la Argentina
En Argentina, hay una fuerte discusión acerca de la soberanía alimentaria, como puja política ante los productores de alimentos que conforman una férrea concentración del mercado. Además de los métodos intensivos en la agricultura y el uso de agrotóxicos.
En contraposición, un número creciente de personas optó, durante la pandemia de coronavirus, por comprar productos agroecológicos, como una manera de comer más saludable, pero también como parte de este cambio de paradigma que lleva a una producción más amigable con la tierra.
En 2020, la Universidad de Agronomía de la UBA, lanzó el “Bolsón Soberano”, que comercializa frutas, hortalizas y productos de almacén cooperativos a domicilio, llegó a vender más de 900 bolsones por mes.
Por otro lado, no deja de ser un tema en tensión los precios, que escalana semana a semana. En tal sentido, además de la calidad, los consumidores buscan precios mayoristas, como en el programa Mercado Federal Ambulante en el área del AMBA, lanzado por la secretaría de Comercio Interior del gobierno nacional.
“El Bolsón Soberano es un proyecto que comercializa de forma alternativa bolsones de entre cinco y siete kilos de verduras frescas producidas por familias horticultoras del AMBA que se encuentran en transición hacia la agroecología”, explicó Juan Cruz Demicheli, integrante del proyecto, que funciona desde hace cinco años.
La iniciativa amplió y fortaleció la red de organizaciones con las que trabaja y diversificó la oferta de productos que comercializa, según el sitio “Sobre La Tierra”, del Área de Divulgación Científica y Tecnológica de la facultad de Agronomía.
Quizás, todavía no marquen una significativa variante en el mercado de los productos alimenticios pero no deja de ser un comienzo, acorde con lo que científicos de todo el planeta advirtieron para evitar seguir escalando en la crisis climática y socio ambiental que aqueja a todo el planeta.
