El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lanzó el Sistema Integrado de Movilidad Urbana, una iniciativa que busca revolucionar el transporte en la ciudad. El jefe de Gobierno, Jorge Macri, subrayó la importancia de colocar a Buenos Aires entre las diez principales ciudades del mundo en términos de movilidad. Este ambicioso plan incluye la renovación de la red de subtes y premetro, la reestructuración del tránsito y una mejora sustancial en la calidad del servicio de colectivos. Uno de los aspectos más innovadores de este proyecto es el TramBUS, un sistema de transporte eléctrico que combina lo mejor de los colectivos y los tranvías, brindando una opción más ecológica y eficiente para los desplazamientos en la ciudad. Cómo viajar en el nuevo colectivo eléctrico en Buenos Aires //Mirá también: A una hora de la Ciudad, se encuentra este maravilloso pueblo que enamora con su laguna encantadora El TramBUS es completamente libre de emisiones contaminantes, favoreciendo un entorno más limpio y saludable. Equipado con baterías que se recargan en las estaciones mientras los pasajeros embarcan y desembarcan, este moderno vehículo no requiere infraestructura adicional como vías o cables. Cada TramBUS podrá transportar entre 75 y 85 pasajeros, y se estima una inversión de 27,7 millones de dólares para su puesta en marcha. En una primera etapa, se lanzarán 20 unidades que conectarán la Ciudad Universitaria con la zona de Retiro, facilitando la conexión con otros medios de transporte público, como el subte y el Metrobus. Se prevé que el proyecto se complete en un plazo de 36 meses, aunque podría extenderse dependiendo de diversos factores. En una primera etapa, se lanzarán 20 tramBUS //Mirá también: El mayor operador de aeropuertos hace del “turismo sustentable” un nuevo negocio En cuanto al pago de los pasajes, se confirmó que el TramBUS aceptará la tarjeta SUBE, facilitando a los usuarios la integración con este nuevo medio de transporte. Además, el Gobierno de la Ciudad planea implementar un sistema de multipago, lo que permitirá a los pasajeros abonar sus viajes con tarjetas de crédito, la SUBE o dispositivos móviles con tecnología NFC. Aunque aún no se definió el costo del pasaje, se espera que sea competitivo en comparación con otros medios de transporte de la ciudad, siguiendo ejemplos exitosos de ciudades como Ciudad de México, Quito y París. Con estas acciones, el Gobierno porteño busca no solo modernizar el transporte público, sino también convertir a la ciudad en un lugar más accesible, eficiente y amigable con el medioambiente.
