Aseguran que el té en bolsita libera microplásticos que son muy peligrosos para la salud
Un estudio revela que las bolsas de té comerciales, fabricadas con polímeros como nylon y polipropileno, liberan millones de partículas plásticas en la infusión.
A pesar de ser una opción práctica, consumir té en bolsitas de cualquier tipo podría tener efectos negativos en la salud, según una investigación realizada por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en colaboración con expertos del Centro Helmholtz de Investigación Ambiental de Leipzig, Alemania.
El motivo de esta preocupación radica en la alta cantidad de microplásticos que contienen, tal como señalan los investigadores. Estas partículas también están presentes en productos como ropa, cigarrillos y cosméticos, pudiendo alcanzar tamaños de hasta cinco milímetros, lo que las convierte en una amenaza tanto para la salud humana como para otras especies, según el Programa del Medio Ambiente de la ONU.
Además, este componente se ha encontrado en la placenta de recién nacidos, lo que pone en evidencia su presencia en el cuerpo humano. En cuanto a los posibles efectos en la salud, datos de National Geographic sugieren que los microplásticos están relacionados con problemas pulmonares, como el asma y la EPOC, enfermedades que causan millones de muertes anualmente.
//Mirá también: Este gigante de los aeropuertos logró reducir casi un 30% el uso de plásticos
Los investigadores advierten que los envases de alimentos son una de las principales fuentes de contaminación por microplásticos y nanoplásticos (MNPLs), siendo la inhalación y la ingestión las principales vías de exposición humana.
Qué dicen los estudios sobre el té de bolsita y los microplásticos
El estudio señala que las bolsas de té comerciales hechas a base de polímeros, compuestos por macromoléculas formadas por una o más unidades químicas, liberan millones de nano y microplásticos durante la infusión.
Este hallazgo demuestra, por primera vez, que estas partículas pueden integrarse a las células intestinales humanas, llegando a la sangre y extendiéndose por todo el cuerpo. La contaminación por plásticos representa un desafío ambiental crítico, con consecuencias cada vez más graves para la salud y el bienestar de las generaciones futuras.
En este contexto, un estudio realizado por el Grupo de Mutagénesis del Departamento de Genética y Microbiología de la UAB (noreste de España) logró identificar y caracterizar micro y nanoplásticos provenientes de diversos tipos de bolsitas de té comerciales.
Los investigadores observaron que al preparar la infusión con estas bolsitas, se liberan grandes cantidades de partículas de tamaño nanométrico y estructuras nanofilamentosas, constituyendo una significativa fuente de exposición a micro y nanoplásticos. Es importante destacar que las bolsitas utilizadas en el estudio estaban fabricadas con polímeros como nylon-6, polipropileno y celulosa.
//Mirá también: Los nanoplásticos y su impacto en la efectividad de los antibióticos: un riesgo emergente para la salud
Los resultados del trabajo muestran que, en la elaboración de una infusión, el polipropileno libera aproximadamente 1 mil 200 millones de partículas por mililitro, con un tamaño medio de 136,7 nanómetros, y la celulosa unos 135 millones de partículas por mililitro, con un tamaño medio de 244 nanómetros.
La labor de los investigadores precisó el uso de distintas técnicas analíticas avanzadas, como la microscopía electrónica de escaneo (SEM), la microscopía electrónica de transmisión (TEM) o la espectroscopia de infrarrojos (ATR-FTIR), entre otras.
«Hemos conseguido caracterizar de forma innovadora estos contaminantes con un conjunto de técnicas de vanguardia, lo que constituye una herramienta muy importante para avanzar en la investigación sobre los posibles impactos en la salud humana», destacó la investigadora de la UAB, Alba García.
