Comercio detectó una “estafa” de mayoristas con aceites a precios por encima de los acordados
Según informó la Secretaría, vendían a comerciantes minoristas el mismo producto “a un precio mucho mayor a los valores acordados en el programa Precios Justos”.
La Secretaría de Comercio detectó una “presunta estafa” por parte de los mayoristas en la comercialización, sobre todo, de los aceites, luego de una serie de operativos de relevamiento.
Allí, descubrieron que algunos productos comprados a precio subsidiado eran revendidos a los minoristas a un precio mucho mayor al acordado en el programa Precios Justos.
Los operativos se concentraron principalmente en los supermercados Yaguar, Maxiconsumo, Vital, Makro y Diario, con el fin de controlar el precio y el stock de los aceites que está dentro del fideicomiso aceitero.
“Se detectaron incumplimientos que constituyen presunto fraude en los precios de venta por parte de los mayoristas ya que comercializan el aceite del fideicomiso a los comercios minoristas a un precio mucho mayor a los valores acordados en Precios Justos”, remarcó Comercio.
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En el caso de probarse la acción, “esta representaría una estafa por parte de los mayoristas hacia el Estado y hacia los consumidores”, aclararon.
Además, Comercio señaló que en las inspecciones se detectaron sobreprecios en aceites de girasol y mezcla en presentaciones de 1,5 litros y 900 ml que van desde un 41% a un 101%.
En ese marco, el secretario de Comercio, Matías Tombolini, informó que enviará un requerimiento de subsanación de desvío detectado a los mayoristas para que puedan resarcir a los consumidores afectados por las sumas cobradas.
“Si te cobran de más deberán devolver el dinero”, explicó el funcionario Tombolini. En este caso, las empresas deberán en el plazo de cinco días dar una respuesta efectiva.
Mientras tanto, los comerciantes minoristas podrán enviar un mail a [email protected] adjuntando la factura de la compra para que la Secretaría requiera al mayorista la devolución del dinero.
Por último, Tombolini se reunió con los abastecedores para ponerlos al tanto de la situación e iniciar una auditoría que “demuestre que estas compañías entregaron a precio subsidiado la mercadería que luego se comercializaba a precio vil”, completó.