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Diseño y eficiencia

Así son las mini casas argentinas ideales para turismo rural o vivienda permanente

Diseño modular, construcción rápida y bajo impacto ambiental definen a estas viviendas que ganan terreno en la Argentina como opción flexible.

Las mini casas modulares ganan terreno en la Argentina como una alternativa habitacional que combina diseño, eficiencia y sustentabilidad. En un contexto marcado por la búsqueda de soluciones más accesibles, rápidas de construir y con menor impacto ambiental, este tipo de viviendas se posiciona tanto para el turismo rural como para quienes eligen un estilo de vida permanente más simple y conectado con la naturaleza. En la Patagonia, una empresa nacida en San Martín de los Andes impulsa este modelo con una propuesta que apuesta por la personalización, la movilidad y la calidad constructiva.

Las mini casas argentinas ideales para turismo rural o vivienda permanente son un boom

Las mini casas no solo responden a una tendencia global de reducción de metros cuadrados, sino también a un cambio cultural: priorizar el uso inteligente del espacio, la eficiencia energética y la posibilidad de habitar distintos territorios sin obras invasivas. En zonas rurales, destinos turísticos o terrenos alejados de grandes centros urbanos, estas viviendas ofrecen una solución concreta frente a los altos costos de la construcción tradicional y los largos plazos de obra.

Diseño modular, movilidad y bajo impacto ambiental

Las viviendas modulares transportables se construyen en fábricas bajo condiciones controladas, lo que permite optimizar tiempos, reducir desperdicios y garantizar estándares de calidad más precisos. En el caso de las mini casas desarrolladas por Custom Haus, el sistema constructivo se basa en tecnología Steel Frame, una estructura liviana y resistente que ofrece un alto rendimiento térmico y estructural, incluso en zonas expuestas a vientos intensos o actividad sísmica.

Uno de los principales diferenciales de este tipo de viviendas es su carácter transportable. Al tratarse de módulos que se fabrican íntegramente en planta, la casa puede trasladarse e instalarse en distintos terrenos, acompañando cambios de proyecto, mudanzas o nuevas oportunidades de inversión. Esta movilidad resulta especialmente atractiva para emprendimientos de turismo rural, glamping o alquiler temporario, donde la flexibilidad es clave.

Diseño modular, construcción rápida y bajo impacto ambiental definen a estas viviendas

El enfoque sustentable atraviesa todo el proceso. Desde el diseño hasta la instalación, se promueve el uso de energías renovables y soluciones que minimizan el impacto ambiental sobre el terreno. Al no requerir grandes movimientos de suelo ni estructuras permanentes, la intervención en el entorno es menor, algo valorado en áreas naturales o protegidas. Además, la eficiencia energética permite reducir el consumo a largo plazo, un aspecto central tanto para uso turístico como residencial.

De la fábrica al terreno en pocos días

La rapidez de ejecución es otro de los factores que explica el crecimiento de las mini casas modulares en el país. Mientras una vivienda tradicional puede demorar meses o incluso años, estos modelos se fabrican en plazos que van de los 60 a los 120 días, dependiendo de la cantidad de módulos. Una vez finalizada la producción, la instalación en el terreno se completa en apenas 24 a 72 horas, dejando la casa lista para habitar.

Este sistema no solo reduce tiempos, sino también imprevistos y sobrecostos habituales de la obra húmeda. Al producirse en una fábrica de más de 1.000 metros cuadrados, con equipos técnicos especializados, cada etapa del proceso se controla con precisión. La estandarización de ciertos componentes convive con un alto grado de personalización: los clientes pueden definir la distribución, los materiales, los acabados y el diseño interior según sus necesidades y estilo de vida.

Las mini casas cuentan con interiores modernos y funcionales, pensados para maximizar cada metro cuadrado sin resignar confort. La optimización del espacio es una de las claves del diseño: ambientes integrados, soluciones de guardado inteligentes y una estética contemporánea que se adapta tanto a entornos rurales como a zonas más urbanizadas.

Cada vez ganan más terreno en Argentina debido a la flexibilidad que tiene para instalarlas y pagarlas

El uso de materiales de alta calidad y productos seleccionados del mercado garantiza durabilidad y bajo mantenimiento, dos factores determinantes para quienes buscan una vivienda permanente o una inversión destinada al alquiler turístico. Además, la resistencia estructural del Steel Frame aporta seguridad frente a condiciones climáticas adversas, algo fundamental en regiones como la Patagonia.

Desde San Martín de los Andes, esta propuesta argentina refleja una tendencia en expansión: viviendas más pequeñas, eficientes y adaptables a distintas formas de habitar. Ya sea como casa principal, refugio de fin de semana o unidad turística, las mini casas modulares se consolidan como una respuesta concreta a los desafíos habitacionales actuales, combinando innovación, sustentabilidad y una nueva manera de pensar el hogar.

Fecha de publicación: 30/12, 2:08 pm