Todo se recicla: hasta las barbies se suman a la economía circular

Las compañías internacionales cada vez más se suman a la economía circular y los juguetes no son la excepción. La empresa Mattel anunció que empezará a reciclar antiguas muñecas Barbie este año.

Para poner la estrategia en marcha la empresa creó la marca Mattel Playback, con la busca recuperar y reusar materiales de juguetes viejos para fabricar nuevos modelos de una forma más sustentable.

Y, para cerrar el círculo de la economía, pedirá a los clientes que tengan Barbies o cualquier otro juguete que ya no quieran conservar que los envíen a la compañía.

Cabe destacar que, hasta el momento, la campaña está activa en los Estados Unidos y Canadá, aunque en breve se extenderá a Francia, Alemania y Reino Unido. También se podrán incluir los productos de la marca Matchbox y Mega.

Desde Mattel indicaron que aquellos materiales que no se puedan reutilizar para fabricar juguetes nuevos se usarán en otros productos plásticos o, como última instancia, se valorizarán energéticamente.

“El 80% de ellos terminan en basureros, incineradoras o en el océano”, explican desde la Fundación Ellen MacArthur organización inglesa que promueve la economía circular.

Y agregan que “los juguetes son excelentes ejemplos de artículos que están diseñados para provocar alegría, peo que a menudo terminan como un desperdicio cuando cambian los intereses de juego del niño”.

Lego también se suma

Otra empresa que también decidió sumarse al reciclado de los juguetes es Lego. El gigante danés apostó por probar otros materiales y desde 2018 impulsa una política de cambiar los bloques encastrables de plástico por otros que se fabrican con polietileno vegetal.

“Según el grupo Lego, el 97% de sus ladrillos se guardan y son compartidos por sus propietarios”, explican desde la Fundación Ellen Mcarthur y señalan que “actualmente, el 90% de los juguetes están hechos de plástico, que puede ser un material muy duradero pero a menudo frágil, y los juguetes rotos son los primeros en tirarse”.

En este sentido, un ejemplo es la iniciativa Toy Rescue, impulsada por la francesa Dagoma. ¿Qué brindan? Piezas de repuesto para juguetes rotos, impresas en 3D.