Con el aval del oficialismo, que preside la comisión de Recursos Naturales, a cargo del puntano de La libertad Avanza, Carlos D’ Alessandro, los diputados nacionales resolvieron avanzar en las próximas semanas en el debate de la Ley de Envases para ver si esta vez pueden ponerse de acuerdo en un texto consensuado.
Tras varias consultas con asesores, los diputados acordaron esta semana retomar ese debate -pero en esta oportunidad en conjunto con la comisión de Industria– con reuniones informativas aunque en fecha aún a definir.
Ley de Envases: qué proyectos se debatirán
Para eso, se pondrán a la vista los proyectos -actualmente cuatro- con estado parlamentario que buscan establecer una ley de presupuestos mínimos para la gestión de envases, una iniciativa largamente postergada.
Se trata de proyectos del propio D’Alessandro; del diputado Guillermo Snopek de Encuentro Federal; Natalia Zaracho, de Unión por la Patria, que había sido el que trabó el debate, y de Maximiliano Ferraro de la Coalición Cívica.
La mayoría de los proyectos plantean la necesidad de establecer presupuestos mínimos para la protección ambiental en la gestión de envases y envases post consumo y todos se basan en el principio de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que obliga a los productores a responsabilizarse de la gestión ambiental y su financiamiento.
Asimismo, todas las iniciativas proponen una jerarquía de gestión de residuos, priorizando la prevención, reducción, reutilización y reciclado aunque con ligeras variaciones.
A pesar de estos consensos, existen diferencias sustanciales en los mecanismos propuestos para la implementación de la REP, la estructura de los sistemas de gestión, los instrumentos económicos y el enfoque en la inclusión de recicladores.
Mientras las iniciativas de Zaracho y de Snopek establecen tasas de reciclado para el productor, la de D’ Alessandro y el de Ferraro no establecen ese tipo de gravamen.
El proyecto de Zaracho fue el que tuvo mayores cuestionamientos por parte de los empresarios, en el marco de su debate en 2021 porque establecía como calcularla y ponía al ARCA como recaudador.
La creación de esa tasa puso en alerta a los empresarios y finalmente lograron que la iniciativa se trabara. Este año nuevamente, la intención de los diputados es avanzar en un texto de consenso en el que puedan reflejar al menos los puntos en común para obtener finalmente un texto unificado para establecer un marco regulatorio para la gestión de envases.
¿Un debate postergado?
El debate sobre la gestión de envases lleva más de dos décadas en el Congreso Nacional pero el último capítulo fue en noviembre de 2021 cuando se logró avanzar en un dictamen de comisiones que, sin embargo, nunca llegó al recinto.
La dilación refleja la magnitud de la problemática y la urgencia de encontrar una solución. Si bien existen múltiples iniciativas que han intentado regular la gestión de los envases aún no se ha logrado un marco legal uniforme que cubra las necesidades de todo el país.
Para los ambientalistas, esta falta de normativas claras y coherentes tuvo consecuencias profundas para el manejo de residuos y la salud ambiental del país.
La polémica se reavivó hace 4 años cuando Zaracho presentó el proyecto con el aval del entonces gobierno de Alberto Fernández pero que no pudo ser tratado en el recinto por el lobby que hicieron los empresarios en ese momento por el pago de una tasa para el reciclado, el principal cuestionamiento.
La iniciativa introducía un principio de responsabilidad extendida del productor que no podía ser superior al 3 % del precio mayorista de venta del producto envasado y que buscaba integrar además a la cadena de gestión a los cartoneros.
Con esta nueva impronta, y tras el trabajo de asesores, los legisladores no descartan que esta vez, si se pueda llegar a la media sanción.
En ese sentido, el diputado Snopek, autor de una de las iniciativas, dijo a Economía Sustentable que “la generación de residuos cada vez es mayor acá y en todo el planeta. Con este proyecto buscamos que el sector privado se sume a los esfuerzos que ya realizan municipios y diferentes organizaciones. Jujuy genera un promedio de 700 gramos de residuos por día y por habitante. De eso, la mitad son envases y embalajes, que depende de las empresas. Cuando se sancione esta ley podremos enterrar la mitad y vamos a devolver el otro 50 al circuito productivo para que la economía circular sea una realidad. Tal cual lo planteaba el Papa Francisco”.
Maximiliano Ferraro, de la CC ARI, afirmó a Economía Sustentable que “en Argentina, apenas el 5% de los envases de bebidas y aceites contienen material reciclado, muy por debajo del promedio regional que supera el 15% en países con normas que exigen la incorporación de contenido reciclado en nuevos envases”.
“Solo Argentina y Brasil siguen sin una normativa de este tipo. Nuestro proyecto propone una Ley de Envases con un esquema de responsabilidad extendida del productor que establece metas claras tanto de reciclaje como de uso obligatorio de material reciclado. Esto no solo impulsa la demanda y el valor de los materiales reciclables, fomentando industrias sostenibles y empleo verde, sino que también reduce costos en la gestión de residuos y promueve una economía circular más eficiente”, enfatiza el legislador de la CC.
“El reciclado está en crisis por el ajuste económico, la caída del precio del cartón y el vaciamiento de políticas como Argentina Recicla y Potenciar Trabajo. A pesar de eso, el trabajo cartonero sigue luchando y es clave en el cuidado de nuestra casa común. Por eso impulsamos la Ley de Envases con responsabilidad extendida al productor, para que las empresas se hagan cargo de lo que producen y se garantice el laburo digno y el financiamiento del sistema de reciclado”, afirmó Natalia Zaracho en declaraciones a Economía Sustentable.
¿Cuáles son los proyectos con estado parlamentario y en qué se diferencian?
- Zaracho: El proyecto que la diputada presentó nuevamente este año es prácticamente igual al que en 2021 presentó el Poder Ejecutivo, con la firma del presidente Alberto Fernández. Establece que los productores deben propiciar la gestión de los envases a través de Sistemas Integrales de Gestión Privada (SIGP), Sistemas de Depósito Devolución Retorno y Reutilización (SDDRR) y Sistemas Locales de Gestión Integral de Envases (conformados por las Autoridades Locales). Los productores que no utilicen un SIGP o SDDRR deberán utilizar estos sistemas locales mediante el pago de la Tasa Ambiental de Responsabilidad Extendida del Productor (TAREP). Promueve la participación de los trabajadores recicladores.
- Snopek: El proyecto prevé la implementación de Sistemas GAE (Gestión Ambiental de Envases) que pueden ser individuales o colectivos, e incluso articular con sistemas públicos a través de convenios. Incluye el uso de sistemas DDR. Se establece un Programa Nacional de Fortalecimiento de los Trabajadores Recicladores e incorpora instrumentos económicos. Además se contempla también una tasa a abonar por los generadores que no organicen los Sistemas GAE obligatorios.
- D’ Alessandro: El proyecto establece que los productores deben cumplir sus obligaciones a través de la conformación de Sistemas de Gestión privados, individuales o colectivos. Se presentan dos tipos de sistemas de gestión: Sistema Integrado de Gestión Ambiental de Envases (SIG) y Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (DDR). Adicionalmente, los productores responsables pueden presentar a las autoridades competentes un sistema de gestión superador basado en la Mejor Práctica de Gestión Disponible (MPGD). La REP se cumple a través de la financiación directa de estos sistemas, sin la creación de tasas ni fondos.
- Ferraro: El proyecto establece que los sujetos obligados deben establecer y organizar a su costo uno o varios sistemas de gestión ambiental para cumplir con los objetivos y metas de la ley. Se puede implementar un Sistema Integrado de Gestión Ambiental de Envases (SIG) que puede ser público, privado o mixto, individual o colectivo. Además, se contempla la adhesión a Sistemas Públicos de Gestión Ambiental de Envases mediante acuerdos con las autoridades. Contempla metas de contenido reciclado.
¿Cómo es la gestión de envases en Europa?
En diferentes países, la gestión de envases tiene diferentes procesos. Algunos de ellos llevan adelante sistemas de incentivos para fomentar la correcta separación de los residuos.
- Alemania: Implementó el sistema «Pfand» en 2005, donde se paga una fianza por los envases de bebidas, que se devuelve al devolverlos en máquinas especializadas en supermercados. Este sistema ha logrado un alto porcentaje de reciclaje, con aproximadamente el 97% de botellas de plástico recicladas.
- Noruega: Es considerado un modelo a seguir en reciclaje, con un sistema de depósito, devolución y retorno muy eficiente.
- Finlandia: También utiliza el sistema SDR para envases de bebidas, con el objetivo de incentivar su retorno y reciclaje.
Sistemas de Recogida Selectiva:
- Suiza y Irlanda: Separación de vidrio por colores en contenedores específicos.
- Irlanda: Permite la elección entre bolsas específicas o el uso de etiquetas para indicar el contenido de las bolsas.
- Reino Unido: Cada ayuntamiento establece los colores de los contenedores y los días de recogida de residuos, con recogida no diaria como en España.
- Suecia: Se enfoca en la separación exhaustiva de residuos en bolsas de colores en el hogar, para luego ser incinerados en estaciones de reciclaje.