Instan a los líderes mundiales a retomar el compromiso de abandonar los combustibles fósiles
Decenas de exmandatarios y premios Nobel denuncian que las negociaciones recientes eliminaron toda mención a los combustibles fósiles del borrador del Pacto por el Futuro.
Exmandatarios y premios Nobel denuncian que las negociaciones internacionales recientes eliminaron toda mención a los combustibles fósiles del borrador del Pacto por el Futuro y reclamaron a los representantes políticos que recuperen la promesa de abandonar el carbón, el petróleo y el gas.
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Así lo reflejó en un escrito 77 antiguos jefes de Gobierno –entre ellos, el ex primer ministro sueco Stefan Löfven, la expresidenta irlandesa Mary Robinson o el expresidente de Costa Rica, Oscar Arias Sánchez– y ganadores del premio Nobel en diferentes categorías, como el Dalai Lama (1989) o la estadounidense Jody Williams (1997).
En la carta, difundida este martes, los diplomáticos y figuras de prestigio internacional exigieron a los actuales jefes de Estado y de Gobierno convocados a la Cumbre para el Futuro en Nueva York que adopten “compromisos firmes para gestionar y financiar una transición mundial rápida y justa que abandone la extracción de carbón, petróleo y gas en consonancia con el límite de 1,5 ºC acordado por las naciones en el Acuerdo de París”.
“Si la Cumbre para el Futuro no aborda la amenaza de los combustibles fósiles, no será digna de su nombre, arriesgándose a socavar una oportunidad única en un siglo para restaurar la confianza en el poder de la cooperación internacional”, sumaron.
Qué es el Pacto del Futuro
El Pacto por el Futuro es un documento que los líderes mundiales planean publicar en la cumbre de alto nivel que tendrá lugar en septiembre en Nueva York (EEUU).
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En este encuentro de alto nivel que será en septiembre la sede de Naciones Unidas de Nueva York, los líderes mundiales emitirán un “Pacto por el Futuro” mediante el que fijan cerca de sesenta compromisos en materia climática y medioambiental, según el último borrador de dicho acuerdo.
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“Las acciones a las que se comprometen con este Pacto van desde la adopción de medidas “audaces, ambiciosas, aceleradas, justas y transformadoras” para aplicar la Agenda 2030 -a lo que añaden la coletilla habitual de “sin dejar a nadie atrás”-, hasta el refuerzo de la gobernanza del espacio ultraterrestre “para fomentar su utilización pacífica, segura y sostenible en beneficio de toda la humanidad”. Entre esta primera y última promesa del Pacto se incluyen otras tantas que fijan metas en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (erradicar la pobreza, asegurar la paz, luchar contra la crisis climática, etcétera)”, explican en la agencia de noticias EFEVerde.
Si bien la declaración de la COP28 en Dubái instó a los países a “dejar atrás los combustibles fósiles”, el borrador más reciente del Pacto por el Futuro no incluye ninguna mención a estas fuentes de energía contaminantes –que son los principales culpables del calentamiento global–, y tampoco habla de “transición justa”, términos que sí incluía una versión anterior del documento.
En el Pacto que los representantes de los países habían esbozado en enero de este año, los gobiernos reconocían “la necesidad de reducciones profundas, rápidas y sostenidas de las emisiones de gases de efecto invernadero en consonancia con las trayectorias de 1,5 °C” y pedían a las partes que contribuyan a ese esfuerzo mundial mediante, entre otras opciones, “la transición para abandonar los combustibles fósiles en los sistemas energéticos” y “de una manera justa, ordenada y equitativa, acelerando la acción en esta década crítica, con el fin de lograr una reducción neta a cero en 2050, de conformidad con la ciencia”, como recoge el acuerdo de Dubái. Además, en el siguiente párrafo establecía el compromiso de las partes “a fijar un plazo para eliminar los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles”, algo que también se ha eliminado.
“La omisión de los combustibles fósiles en el borrador del Pacto por el Futuro es otro fracaso estrepitoso a la hora de afrontar una de las mayores amenazas para nuestro planeta y la humanidad”, afirmó Löfven en un comunicado.
Y sumó: “Los líderes mundiales deberían ser inequívocos a la hora de actuar de forma decisiva y colectiva para evitar nuevos impactos climáticos y, en cambio, están decidiendo esconder la cabeza bajo el ala. Sólo mediante una cooperación internacional inquebrantable para eliminar progresivamente los combustibles fósiles podremos salvaguardar nuestro futuro común”.