Un grupo de vecinos de Brandsen logró frenar el avance de las termoeléctricas contaminantes
El Concejo Deliberante rechazó el pasado el proyecto para instalar dos centrales termoeléctricas en una zona rural. Los detalles.
La comunidad de Brandsen logró una victoria histórica tras lograr frenar el avance de las termoeléctricas contaminantes, aunque advierte que «la lucha no terminó» en la localidad de la provincia de Buenos Aires.
El Concejo Deliberante rechazó el lunes pasado el proyecto para instalar dos centrales termoeléctricas en una zona rural cercana a barrios, escuelas y campos de cultivo. Con movilización, información y presión social, los vecinos y vecinas lograron frenar un emprendimiento que amenazaba con contaminar el aire, el agua y alterar el equilibrio ambiental de toda la región.
El megaproyecto de las termoeléctricas contaminantes
El megaproyecto impulsado por las empresas SCC Power y MSU Energy, con apoyo del intendente Fernando Raitelli (Unión por la Patria), preveía la construcción de plantas que quemarían gas natural y fueloil, dejando a su paso «aire viciado, agua envenenada y ruidos de hasta 107 decibeles, muy por encima del límite recomendado por la OMS para preservar la salud mental y física».
Desde que se conoció el plan, la ciudadanía denunció graves irregularidades: falta de acceso a información pública, ausencia de audiencias y un «estudio de impacto ambiental plagado de omisiones». Los informes, presentados una semana después del proyecto, usaban datos del censo 2010, «ignoraban el crecimiento poblacional reciente y minimizaban los efectos sobre el acuífero Puelche y el humedal protegido conectado al arroyo San Luis», según informan medios locales.
No a las termoeléctricas
Volanteadas, cortes en la Ruta 2, vigilias frente al Concejo, y una consigna clara que unió a toda la comunidad: «Termoeléctricas NO». La votación final reflejó la presión social: siete concejales de Juntos por el Cambio se opusieron, cinco de Unión por la Patria apoyaron el proyecto y uno de La Libertad Avanza se abstuvo.
Ahora, el intendente tiene cinco días para decidir si veta la resolución del Concejo. «La amenaza sobre nuestro territorio no ha cesado», afirmaron los vecinos en un comunicado que difundieron por su cuenta de Instagram.
«La lucha judicial no terminó. Todo lo contrario: recién empieza, con firmeza y convicción. Vamos a seguir hasta que queda claro y firma que no se puede negociar el futuro de un pueblo, ni con la salud de las próximas generaciones», aseguraron.