Energía renovable sobre 4 ruedas: el Tesla Cybertruck tendrá techo solar
Musk confirmó que su esperado Cybertruck tendrá una opción con techo solar instalado en la amplia parte trasera que cubre la zona de carga.
Muchos aseguran que Tesla será mucho más que una empresa de coches en un futuro cercano. La apuesta es que se acabará convirtiendo en un poder del sector energético a nivel mundial.
Así como Apple pasó de vender ordenadores a revolucionar la industria de la música y los teléfonos móviles; o Amazon arrancó con libros para convertirse después en el amo y señor del comercio electrónico, Tesla va camino de mutar en un concepto con muchas más aristas que la automotriz. Y ese camino pasa por la energía solar.
Elon Musk, el CEO de la compañía, dijo en 2017 que no veía factible la idea de instalar techos solares en sus coches, particularmente en su modelo más asequible, el Model 3. Le parecía que no había espacio suficiente para generar una cantidad de energía significativa.
Tres años más tarde parece haber cambiado de opinión. Musk ya ha confirmado que su esperado Cybertruck, la pickup futurista que presentó en sociedad en noviembre de 2019, tendrá una opción con techo solar instalado en la amplia parte trasera que cubre la zona de carga.
El objetivo es generar unos 24 kilómetros de autonomía adicional por día, que podría será suficiente para el recorrido habitual diario de muchos conductores. Es la primera vez que Tesla confirma la instalación de un sistema de placas solares en el techo en uno de sus modelos.
La fórmula no es nueva. Ya la usó Toyota en el Prius y sigue desarrollando el concepto y, además, ya hay coches eléctricos que tienen su carrocería recubierta de paneles solares que alimentan sus baterías.
También es un primer paso hacia la generación interna de energía que permita autoabastecerse a cada uno de sus coches y almacenar suficiente cantidad como para comerciar después con ella. La ambición es una flota inmensa de vehículos a nivel mundial convertida en centrales eléctricas en miniatura en movimiento constante.
Si funciona o no el concepto es algo que se podrá empezar a comprobar a partir de 2021, que es cuando está previsto que las pick up de acero inoxidable y un look inspirado en Blade Runner salgan al mercado.
Por ahora, los pedidos superan ya el medio millón de unidades. Tesla aún no ha confirmado cuánto costará el elemento adicional en un vehículo cargado de alicientes para sus futuros dueños. De serie tendrá cristales blindados, una autonomía de 400 kilómetros por carga, una capacidad de remolque de 3.400 kilos y una aceleración de 0 a 100 km en 6,5 segundos.
De momento, Musk sigue firme en su ambición de quedarse con parte del mercado de las placas solares para viviendas en EEUU. No es un proceso barato -en torno a unos 83.000 dólares para una casa de tamaño promedio-pero no solo elimina de raíz el problema de las facturas eléctricas convencionales sino que soluciona la cuestión estética, un factor trascendental para muchos.
Lo que ofrecen son tejas solares que imitan el estilo de las convencionales y que generan energía suficiente para abastecer la vivienda y cargar los coches eléctricos que hagan falta. Es la pata menos conocida de Tesla pero una que ciertos analistas creen que podría competir con el negocio de los coches a medio plazo.
“El futuro que todos queremos es un futuro donde miremos alrededor y veamos tejados almacenando energía y haciendo algo útil”, dijo Musk en una conferencia sobre el producto.
Esas tejas solares ya han comenzado a proliferar en algunos barrios pudientes de California y la ambición es vender el ecosistema completo de costa a costa: el coche eléctrico en el garage, la batería Powerwall de uso doméstico para almacenar la energía y un tejado solar elegante.