El cambio climático pone en jaque a la mayor reserva de meteoritos extraterrestres en la Antártida
El aumento en las temperaturas debido al calentamiento global podría causar la pérdida de datos científicos importantes.
La Antártida alberga la mayor concentración de meteoritos de la Tierra, con más del 60 por ciento de los hallazgos de meteoritos originándose allí. Sin embargo, el calentamiento global está amenazando la preservación de estos meteoritos, y un nuevo análisis sugiere que cerca de las tres cuartas partes de los meteoritos del continente podrían desaparecer de la superficie de la capa de hielo hacia finales de siglo, lo que haría casi imposible detectar o recuperar estas valiosas rocas espaciales.
La investigación, publicada en Nature Climate Change, utilizó un algoritmo de aprendizaje automático para proyectar cómo les irá a los meteoritos antárticos en condiciones climáticas simuladas. Los meteoritos de la Antártida se acumularon en zonas de impacto en el continente hace miles de años y quedaron atrapados en el hielo. Hoy en día, suelen encontrarse en áreas de “hielo azul”, bolsas donde el viento revela hielo más antiguo que aparece azul en contraste con las vastas extensiones blancas del continente.
Los meteoritos son particularmente sensibles a la temperatura, explican los investigadores, y cuando se exponen al sol, su superficie más oscura se calienta, lo que puede derretir el hielo debajo y hacer que se hundan más profundamente dentro de la capa de hielo.
Los investigadores predicen que, en todos los escenarios de emisiones, al menos 5.000 meteoritos desaparecerán de la superficie cada año. Cada décima de grado de aumento de temperatura se asocia con una pérdida de entre 5.100 y 12.200 meteoritos, y en un escenario de emisiones altas, se perderá el 76 por ciento de las áreas actualmente cubiertas por meteoritos.
Esta sería una pérdida catastrófica para los científicos espaciales, quienes valoran los meteoritos por la información que proporcionan sobre el desarrollo de nuestro sistema solar. Desde su formación hace miles de millones de años, estas rocas espaciales ofrecen valiosas pistas sobre las estrellas, la formación planetaria e incluso la historia geológica de la Tierra.
Por lo tanto, advierten los investigadores, es crucial recolectar “rápida y decididamente” tantos ejemplares como sea posible antes de que se vuelvan inaccesibles para la ciencia.
“Necesitamos acelerar e intensificar los esfuerzos para recuperar meteoritos antárticos”, dijo en un comunicado de prensa Harry Zekollari, un glaciólogo que dirigió la investigación mientras trabajaba en el departamento de ingeniería civil, ambiental y geomática de ETH Zurich .
“La pérdida de meteoritos antárticos es muy parecida a la pérdida de datos que los científicos obtienen de los núcleos de hielo recolectados de los glaciares en desaparición: una vez que desaparecen, también desaparecen algunos de los secretos del universo”, concluyó.