PUBLICIDAD

Efecto pandemia: Quilmes y CCU ponen en marcha planes para la “nueva sustentabilidad”

Los principales players en Argentina reformulan sus estrategias para adaptarlas al nuevo escenario medioambiental generado por el combate el coronavirus

La producción y venta de cerveza industrial no se encuentra atravesando un buen momento. La llegada de la pandemia del Covid-19 y las medidas sanitarias  tomadas por el Gobierno para combatir el virus impactaron de manera negativa en esta industria, con una caída del orden del 35% en volumen, con respecto al año pasado.

Este escenario de crisis y de cambio en las reglas de juego del negocio, obligó a los principales grupos productores a acelerar los procesos de adaptación a la “nueva realidad” post pandemia.

No sólo para reconvertir su producción a la demanda actual y al comportamiento de los consumidores, sino también a las necesidad de establecer nuevas metas de comportamiento frente al medio ambiente y a la sustentabilidad de las operaciones.

En la Argentina, la posta la tomaron las dos mayores compañías del sector como son Cervecería y Maltería Quilmes y Compañía Cerveceras Unidas (CCU), que representan casi el 90% del market share doméstico.

Ambas destacan un mismo objetivo: continuar elaborando bebidas durante los próximos 100 años pero haciendo foco en la preservación del medio ambiente a partir del cumplimiento de las metas establecidas por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). 

Esto significa tomar a la sustentabilidad como el negocio, como parte principal de la toma de decisiones y del objetivo de ser más eficientes, crecer y trabajar durante los próximos 100 años.

También, aprovechar el poder de las marcas con propósito que contribuyan e impulsen la transformación cultural que implica el desarrollo sustentable.  Es decir, concientizar con las etiquetas más reconocidas sobre la necesidad de transformar la matriz energética y visibilizar la lucha contra el cambio climático y, a la vez, generar nuevos hábitos de consumo, en respeto con el medio ambiente.

Nuevas tecnologías

Bajo el paradigma de la economía circular, tanto Quilmes como CCU impulsan la implementación de prácticas sustentables y nuevas tecnologías en la elaboración de cerveza, integrando los aspectos ambientales en el plan de negocios, en la toma de decisiones y en las actividades diarias.

Tanto Martín Ticinese, CEO de Quilmes, como Fernando Sanchis, gerente General de CCU Argentina comparten la misma visión sobre las metas de la industria en su camino hacia una “nueva sustentabilidad”.

“Nos permiten potenciar el progreso integral de toda nuestra cadena de valor, desde el campo que provee nuestros ingredientes naturales hasta el vidrio de la botella para nuestras bebidas”, agrega el máximo responsable de la compañía líder del mercado local.

“Para CCU, la sustentabilidad es un pilar estratégico para alcanzar su propósito de crear experiencias para compartir un mejor vivir, y es por eso que asumimos el compromiso de trabajar sobre metas ambiciosas de cuidado medioambiental”, agrega el principal ejecutivo en el país del grupo chileno que, entre otras marcas, elabora Schneider, Heineken, Miller, Imperial, Amstel, Sol, Santa Fe, Salta, Córdoba y Palermo.

En ambas compañías, las estrategias son pensadas a más de 30 años de plazo y con una mirada que comparte los problemas locales con los globales y que abarca la colaboración con los  gobiernos de turno, las asociaciones civiles, los institutos de investigación y otras organizaciones comerciales. 

El poder de las marcas es otro de los puntales para Quilmes y CCU a la hora de  lograr un cambio positivo y generar nuevos hábitos en los consumidores.

En cuanto a los desafíos globales incluidos en la agenda de ambas productoras se destacan los de adaptarse a escenarios como la pobreza en las regiones donde operan, en especial en Latinoamérica, donde el 10% más rico de la población concentra el 68% de la riqueza total, mientras el 50% más pobre solo accede al 3.5% de la riqueza total.

También sobresalen las inclemencias meteorológicas de la región a partir de los efectos del cambio climático por lo cual el objetivo buscado es el de reducir a la mitad las emisiones de carbono de la industria para el año 2030.

El  tercer punto de esta agenda ambiental corresponde al agua por las preocupantes predicciones que anticipan que para el 2050 al menos un 25% de la población mundial viva en un país afectado por escasez crónica y reiterada.

Los residuos se ubican como el cuarto aspecto de esta agenda al tenerse en cuenta que el mundo produce al año cerca de 1.500 millones de toneladas, cifra que alcanzaría para cubrir toda la Ciudad de Buenos Aires hasta un edificio de siete pisos, según detalla un informe de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Argentina (SAYDS).  De este total, el documento asegura que más de un 90% es material reciclable o compostable.

En el  caso de Quilmes, viene encarando una serie de estrategias vinculadas a todos estos preceptos de sustentabilidad con la mirada puesta en el 2025:

  • Cambio climático y energía renovable   a partir del Parque Eólico Budweiser en Achiras, Córdoba, que cuenta con 21 molinos de viento de 126 metros de altura cada uno y su construcción genera 700 nuevos empleos.
    Abastecerá 10 cervecerías y plantas de gaseosa, dos malterías y una fábrica de tapas corona, que en conjunto consumen tanta energía como 69.000 casas en un año.
    Permitirá reducir 25% las emisiones de CO2, el equivalente a retirar de las ciudades 500.000 autos. Además,  firmaron un contrato de compra de energía con Central Puerto Renovables por u$s283 millones por 20 años.  
  • Agricultura sustentable para que sus 1.500 productores agropecuarios que cultivan cebada, lúpulo y maíz estén conectados, capacitados y fortalecidos. 
  • Agua, a partir de proteger las cuencas hídricas en riesgo, participar en el Fondo de Agua en la cuenca del río Mendoza y cuidando el recurso en sus cervecerías, lo que le permitió reducir un 35% su consumo en el periodo 2009-2017.
  • Packaging, para que el 100% de sus envases sean retornables o estén fabricados con materiales reciclados. En especial, a partir de la retornabilidad de las botellas de vidrio ya que son usadas 29 veces. Sus plantas tienen un 99,7% de reciclabilidad convirtiéndose todo residuo en subproducto para la producción de uno nuevo. 
  • Cadena de Valor, para que más de 5.000 PyMEs estén conectadas, capacitadas y fortalecidas para el desarrollo de las economías regionales y locales. 

Estos cinco objetivos desafiantes tienen indicadores medibles y auditables, y planes de acción concretos basados en la ciencia y la tecnología para su cumplimiento, acompañados por una inversión de u$s u$s1.800 millones, de los cuales ya ejecutamos el 50% en aumentar la capacidad productiva para aumentar la oferta en lugares de mayor demanda y así reducir las emisiones de carbono de logística”, detalla Ticinese.

El ejecutivo recuerda la inauguración de la primera Maltería Verde en Argentina que cuenta con tecnología basada en la economía circular con reutilización del 100% de subproductos, agua tratada de efluentes y lodos para fertilización ecológica, reconversión eléctrica y la creación de una reserva natural en alianza con Fundación Aves Argentinas. 

También, la compra de envases retornables o heladeras eco-eficientes que tienen LED, sensores de movimiento que reducen el consumo de energía y las emisiones de CO2 con la utilización de gas ecológico.   

Otra pata del programa de Quilmes se basa en la implementación del programa de “Logística verde” junto con sus operadores logísticos con el objetivo de reducir un 35% las emisiones de CO2 en las operaciones logísticas. Actualmente utiliza biodiesel de B60 (60% biodiesel 40% diésel) en 210 camiones directos y en puntos de venta. 

A esto le suma la incorporación de trenes como medio de transporte alternativo;  renovación de flota de camiones ultralivianos; potenciación de un programa de entregas directas y aumento de capacidad productiva en regiones donde existe mayor demanda.

Caso CCU

En el caso de CCU, sus metas medioambientales también se dirigen hacia el 2030 a partir de un modelo de gestión de sustentabilidad.

Los nuevos objetivos del grup de origen chileno ponen el foco en las tres dimensiones que inspiran su trabajo en

Medioambiente como son:

  • Agua para reducir su consumo en un 60%;.
  • Emisiones, para reducirlas de CO2 en un 50%.
  • Residuos, con el objetivo de  valorizar en un 100% los industriales sólidos; utilizar el 50% de material reciclado en envases y embalajes; disponer 100% de envases y embalajes reutilizables, reciclables o compostables; utilizar en un 75% energías renovables y fomentar la economía circular.

 “Nuestro compromiso con la sustentabilidad está basado en lo que somos y en la constante búsqueda de experiencias que contribuyan a una mejor calidad de vida”, señala Juan Pablo Barrale, Gerente de Asuntos Corporativos de CCU Argentina.

El ejecutivo agrega que el modelo de sustentabilidad del gupo tiene tres pilares como son el planeta, las personas y las marcas.

En este marco, en los últimos 10 años, CCU logró reducir un 24% el consumo de energía eléctrica; un -46% el de energía térmica, que es el equivalente a más de 70.000 hogares por año en Argentina. 

En el  caso del agua, se redujo en un 46%, similar a lo que consumen casi 10.000 hogares cada año, mientras que la reducción de gases de efecto invernadero fue del 26%, y la valorización de residuos alcanzó un 99,44%.

En la actualidad, los planes de CCU se extienden no sólo en la Argentina sino también en los otros países donde opera como Chile, Bolivia, Colombia, Paraguay, Perú y Uruguay.

En Argentina es la segunda más grande del mercado cervecero, líder en el sector de sidras y un actor relevante en licores, destilados y vinos.

Su portfolio de marcas incluye las cervezas Schneider, Heineken, Miller, Imperial, Amstel, Sol, Santa Fe, Salta, Córdoba, Palermo, Bieckert, Kunstmann; las sidras Real, La Victoria, y Sáenz Briones 1888; los licores El Abuelo; los vinos La Celia; los piscos Mistral y Control C.

Emplea aproximadamente a 1.800 personas de manera directa; posee cinco plantas industriales; tres centros de distribución propios y trabaja con una red de más de 170 distribuidores.

Fecha de publicación: 10/08, 7:47 am