Dura crítica a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020: “están lejos de ser sostenibles”
Si bien los organizadores pusieron "el respeto por el medio ambiente" entre sus prioridades, una ONG salió al duro cruce.
La ONG ecologista WWF señaló que la organización de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 «genera serias dudas» sobre la sostenibilidad del evento deportivo, debido a sus estándares para usar recursos naturales como la madera, los productos pesqueros o el aceite de palma.
Los organizadores de las próximas olimpiadas han situado el respeto al medioambiente entre sus máximas prioridades para la cita olímpica, y en enero de 2016 se fijaron un código de uso sostenible de recursos y servicios.
Sin embargo, WWF considera que Tokio 2020 está “muy lejos” de alcanzar su objetivo de lograr que las próximas olimpiadas se sitúen “en vanguardia de la sostenibilidad”, según afirma la organización ecologista en una carta remitida al Comité Olímpico Internacional y publicada este lunes.
Los protocolos establecidos para el uso de materias primas como la madera, el papel, los productos pesqueros o el aceite de palma están “muy por debajo de las mejores prácticas existentes a nivel global y son inapropiadas para un evento global como los JJOO”, afirma en la nota el director ejecutivo de WWF Japón, Ron Tsutui.
También critica que el comité organizador “haya mostrado poco interés” por el asesoramiento del grupo de trabajo establecido por los propios responsables de Tokio 2020 con el fin de redactar dichos estándares, y del que formaba parte la citada organización ecologista.
Entre las peticiones concretas que formula WWF se encuentra fijar principios para contar con una información más detallada sobre el origen de todas las materias primas usadas en los Juegos, así como realizar un informe externo final que evalúe los recursos empleados.
Esta ONG afirma que un evento de alto perfil como los JJOO “tiene el deber de mostrar liderazgo” a la hora de usar y consumir recursos naturales de forma sostenible, así como “dejar un legado que ayude a transformar la sociedad”.
En su código de uso sostenible de recursos, Tokio 2020 afirma que “cumplirá todas las normativas vigentes”, además de tomar en plena consideración “el impacto de sus políticas desde el punto de vista del cambio climático, la escasez de recursos naturales o pérdida de la biodiversidad, las prácticas comerciales o los derechos humanos”.