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Debate

Trump mete mano en la fórmula de Coca-Cola, ¿por la salud pública?

La emblemática bebida vuelve al centro del debate en EE.UU. tras una decisión impulsada por el gobierno de Trump. Qué dicen los expertos.

trump - coca cola

Coca-Cola anunció que comenzará a reemplazar el jarabe de maíz de alta fructosa por azúcar de caña en su receta original para el mercado estadounidense. El cambio entrará en vigor este otoño y fue presentado como un logro de la administración de Donald Trump, en el marco de una campaña de salud pública bautizada “Make America Healthy Again”.

Trump mete mano en la fórmula de Coca-Cola.

Desde la Casa Blanca, celebraron la decisión como una «gran victoria», mientras que el propio Trump agradeció públicamente a los ejecutivos de Coca-Cola por aceptar su propuesta. “Será una muy buena decisión por su parte. ¡Es simplemente mejor!”, escribió el mandatario en su cuenta de X, donde recordó que es consumidor habitual del producto.

El cambio, sin embargo, generó debate en el mundo científico. ¿Es realmente más saludable la Coca-Cola con azúcar de caña?

¿Un cambio por salud pública?

Expertos en nutrición aseguran que el impacto en la salud sería mínimo. Kimber L. Stanhope, investigadora de la Universidad de California en Davis, explicó que ambos edulcorantes tienen efectos metabólicos similares.

En un estudio de 2021, financiado por los Institutos Nacionales de Salud de EE.UU., se comprobó que tanto el jarabe de maíz como el azúcar de caña favorecen la acumulación de grasa en el hígado y reducen la sensibilidad a la insulina.

¿Es realmente más saludable la Coca-Cola con azúcar de caña?

“Cambiar el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa por azúcar de caña probablemente no cambie la salud de nadie”, sentenció la científica al medio PBS.

Por su parte, Juliana Cohen, profesora adjunta de nutrición en Harvard, fue más directa: “Es más parecido a ponerle un filtro a un cigarrillo”. Según detalló, una sola lata de Coca-Cola contiene 39 gramos de azúcar, una cifra que supera por sí sola la mitad de la recomendación diaria. “El problema es el exceso de azúcar, no cuál es su fuente”, agregó.

¿Reformulación o nueva versión?

Coca-Cola aún no precisó si este cambio se aplicará a toda la línea de su clásica bebida o si se trata de una alternativa que convivirá con las versiones actuales, como Coca-Cola Light o Zero. Algunos especialistas creen que esta nueva fórmula busca atraer al consumidor nostálgico, como ocurre con la «Coca mexicana», que ya se comercializa con azúcar de caña y es percibida como una versión premium.

Coca-Cola aún no precisó si este cambio se aplicará a toda la línea de su clásica bebida o si se trata de una alternativa que convivirá con las versiones actuales, como Coca-Cola Light o Zero

Duane Stanford, editor de Beverage Digest, sostuvo que el movimiento es parte de una estrategia más amplia de diversificación del portafolio, en sintonía con una demanda creciente por productos más “naturales”.

Un triunfo simbólico

Desde el entorno de Trump insisten en que el reemplazo del jarabe de maíz representa una victoria tanto cultural como alimentaria. El actual secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., ya se había manifestado en contra de este ingrediente en 2023, durante una entrevista con el psicólogo Jordan Peterson.

Más allá del impacto real en la salud pública, la decisión parece tener un peso político y simbólico dentro del relato de campaña de Trump, que busca reposicionarse con mensajes de mejora del bienestar nacional. Para la ciencia, sin embargo, la fórmula sigue siendo —literal y figurativamente— demasiado azucarada.

Fecha de publicación: 04/08, 6:24 pm