Carpooling: qué es y cómo funciona la nueva movilidad sustentable y que busca el low cost

En la búsqueda de soluciones para abordar el desafío ambiental que plantea el transporte en las grandes ciudades, surgió un cambio de paradigma en las políticas. Anteriormente centradas en el uso del automóvil, ahora se han transformado hacia una visión más enfocada en la movilidad sustentable, con las personas como protagonistas centrales.

Este nuevo enfoque hacia la movilidad sustentable impulsa iniciativas como la peatonalización de las principales calles, la creación de carriles exclusivos para bicicletas y la mejora del transporte público con medidas que fomenten su accesibilidad. Sin embargo, uno de los mayores desafíos sigue siendo la integración de los automóviles y la reducción de sus efectos negativos en el medio ambiente.

Carpooling: concepto y funcionamiento

El carpooling es una tendencia global que surge como la solución al tráfico y al cuidado del medio ambiente. Facilitada por plataformas digitales, esta práctica conecta a conductores que tienen asientos libres en sus autos con pasajeros en busca de viajes compartidos. La fórmula es simple pero poderosa: varias personas comparten un mismo vehículo con un destino común.

De esta manera, se optimiza el uso de automóviles al aprovechar todos los asientos disponibles y se evita el uso de más de un auto para viajar al mismo lugar. Esta nueva forma no solo alivia el tráfico y reduce costos, sino que también promueve una movilidad más eficiente y sostenible en las ciudades.

La conexión entre conductores y pasajeros se realiza a través de sitios gratuitos en Internet, donde ambos publican los trayectos que desean recorrer, con fechas y horarios. Cuando hay una coincidencia, el sistema les permite ponerse en contacto para acordar la división de costos y coordinar el viaje.

Beneficios del carpooling

La dinámica del carpooling involucra dos roles fundamentales: el del conductor, que ofrece asientos disponibles en su vehículo, y el del pasajero, en busca de un viaje y dispuesto a compartirlo con alguien que siga su ruta. Esta forma colaborativa de movilidad no solo brinda a los peatones la oportunidad de realizar viajes más cómodos, sino que también permite a los propietarios de vehículos reducir hasta un 75% los costos asociados al transporte, compartiendo gastos como combustible, peajes y estacionamiento con los pasajeros.

Además, esta práctica ofrece diversos beneficios desde las perspectivas económica, social y ambiental de la sustentabilidad, tales como:

– Ahorro de tiempo debido a la reducción del tráfico.

– Reducción de las emisiones de CO2.

– Prevención del estrés asociado a manejar en hora pico.

– Estímulo de la socialización al conocer a personas nuevas que pueden incluso convertirse en amigos.