Así son los drones que siembran árboles en segundos y en lugares inaccesibles
Esta nueva generación de drones diseñados para la reforestación puede plantar plántulas en menos de 10 segundos, incluso en terrenos remotos y difíciles.
Desarrollado por el Instituto Noruego de Bioeconomía (NIBIO) y la Universidad del Sur de Dinamarca, SkyPlanter es un dron que puede plantar una plántula en menos de 10 segundos. Gracias a un sistema de aire comprimido, perfora el suelo, deposita la planta y compacta la tierra en una única maniobra. Su diseño liviano y preciso lo convierte en una herramienta ideal para reforestar zonas remotas y de difícil acceso.
Plantar árboles con drones: ¿una solución real?
- Tecnología ligera, precisa y rápida.
- Funciona en terrenos accidentados e inaccesibles.
- Reduce costos frente a maquinaria pesada.
- Actualmente en fase piloto, pero con gran potencial.
- Ideal para proyectos de reforestación sostenible y a gran escala.
¿Pueden los drones reemplazar la plantación manual?
La plantación tradicional sigue siendo costosa, lenta y muy dependiente de mano de obra. En Noruega, en 2024 se sembraron más de 48 millones de plántulas en 2.600 kilómetros cuadrados, pero el modelo muestra signos de agotamiento: faltan trabajadores, los terrenos son complejos y las máquinas pesadas no siempre se adaptan.
Los drones ofrecen una alternativa viable. Pueden operar en zonas montañosas, de difícil acceso y en condiciones meteorológicas variables, sin compactar el suelo ni dañar el ecosistema.
A diferencia del enfoque de “bombardeo de semillas”, SkyPlanter apuesta por plantación dirigida. Coloca plántulas de forma controlada, aumentando significativamente la tasa de éxito. El procedimiento es rápido y efectivo: perfora, planta y presiona el suelo, todo en menos de 10 segundos.
Hacia la autonomía total
Aunque actualmente necesita un piloto remoto, el objetivo es que SkyPlanter funcione de forma completamente autónoma. Para lograrlo, el equipo trabaja en la incorporación de inteligencia artificial, sensores LIDAR y cámaras multiespectrales. Con estas herramientas, el dron podrá identificar el mejor lugar para plantar, esquivar obstáculos y adaptar su ruta sin intervención humana.
El prototipo actual transporta hasta siete plántulas y vuela durante más de 20 minutos. La próxima versión, ya en desarrollo, ampliará su autonomía y capacidad, y se espera que en el futuro funcione en enjambres coordinados capaces de cubrir grandes superficies con un solo operador en tierra.
Accesible, pero aún en evolución
Una de las grandes ventajas del proyecto es su potencial económico. A diferencia de las costosas máquinas de plantación, los drones ofrecen una solución más accesible y adaptable. Modelos de uso compartido o alquiler podrían facilitar su adopción, especialmente para pequeños propietarios forestales.
Sin embargo, aún quedan desafíos: capacidad de carga limitada, dificultades en suelos duros y la necesidad de mejorar software y hardware. Para ello, ya se están realizando pruebas con la segunda generación del prototipo, que incorpora mejoras clave en diseño y funcionalidad.