Alarma en Uruguay: 1,8 millones de habitantes se quedarán sin acceso al agua potable
Montevideo está al borde de quedarse sin agua dulce para potabilizar. Ya mezclan con agua de mar, como un último recurso. Falta de inversión.
Ante la peor sequía de los últimos 70 años, las reservas de agua dulce en Montevideo, Uruguay, siguen disminuyendo. Ante esta situación, el Gobierno local propone hacer perforaciones en el suelo en búsqueda de líquido.
El presidente de Obras Sanitarias del Estado (OSE), Raúl Montero, puso en números la problemática que está afectando a la capital del país oriental, donde vive aproximadamente la mitad de la población.
De acuerdo a los cálculos, la principal reserva de agua que se encuentra en Paso Severino tiene 4.000.000 metros cúbicos. Entonces, si a ese dato se le agrega que diariamente se beben 200.000 metros cúbicos, en pocos días (23 de junio aprox.) la población se quedará sin agua, afectando a 1,8 millones de uruguayos.
Según Montero, en junio las lluvias fueron prácticamente inexistentes. Por eso debieron utilizar la creatividad y acudir a planes de contingencia para que la población, que llena los supermercados en busca de agua mineral, no deje de tener suministro de la canilla.
Una de esas ideas fue mezclar agua del estuario del Río de la Plata con las reservas potables para engrosar el nivel de suministro, una decisión que no estuvo exenta de polémica por los efectos que podría producir en la salud.
“Es una situación muy crítica. Las autoridades decidieron mezclar agua dulce con agua salada y, como consecuencia, a la gente le llega agua que no es potable”, señaló Federico Kreimerman, presidente de la Federación de Funcionarios de OSE, la empresa estatal a cargo del servicio, en diálogo con Sí 98.9
“Cuando se acabe va a ser 100 por ciento agua de mar y se va a empezar a complicar hasta el punto de vista de la higiene”, agregó.
“Además hay alarma porque hay industrias que no pueden usar agua salada en el proceso productivo y eso no puede justificar despidos”, aclaró.
Solución a corto plazo
En este marco, explicó que “el Ministerio de Salud recomendó usar agua embotellada y eso tiene un costo económico considerable, por lo tanto es una crisis también social porque muchas familias dejan de consumir otras cosas para poder consumir agua embotellada. Reclamamos que haya algún tipo de subsidio ya que medio millón de uruguayos ganan menos que la canasta basica”.
“Lo primero que hay que hacer es exonenar la tarifa del agua y por otro lado regular el precio del agua embotellada cuyas ventas, como era de esperar, aumentaron 350 por ciento. Ha habido desabastecimiento. Las grandes supeficies se compran todo y a los barrios ni llega. Hubo quiebre de stock y empresas que no pueden producir más”, sumó.
En relación a la causa de la crisis y a una posible solución, Kreimerman sostuvo que “hace años que no se invierte en la empresa pública de agua, que no está en condiciones de hacer frente a la crisis y es parte del problema. Dado que en los últimos años no se hizo nada -por ejemplo, construir otra represa que aumentara las reservas- la solución de fondo es la lluvia”.