¿Cómo elegir los electrodomésticos más eficientes?
Las etiquetas de eficiencia energética certificadas son las que permiten realizar compras inteligentes. Qué tener en cuenta y cómo leerlas.
Luego de que el Gobierno de Javier Milei cambiara las normas para el etiquetado de eficiencia energética, la pregunta cómo elegir los electrodomésticos más eficientes y qué se debe tener en cuenta empieza a despertarse entre los consumidores.
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Además, se acerca el verano y el aumento del consumo de electricidad tiene un fuerte impacto en las facturas. En ese contexto, es fundamental conocer la clase de eficiencia energética (EE) de los artefactos.
¿Cómo elegir los electrodomésticos más eficientes?
Frente a dos productos del mismo tipo, ¿cuál consume menos? Estos son algunos de los interrogantes que pueden surgir a la hora de adquirirlos. La respuesta está en las etiquetas de EE certificadas, explican desde IRAM.
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En términos generales, todas se componen de dos partes:
- La superior, más visual, con barras horizontales de colores en escalera descendente donde cada «escalón» representa un nivel o clase de EE (de la «A» a la «G», donde la letra «A» corresponde a los productos más eficientes y la «G» a los menos eficientes)
- La parte inferior, que apunta a su funcionalidad o desempeño.
«Así, el etiquetado basado en normas IRAM les permite a los consumidores comparar y decidir entre diferentes opciones, aquella que, a igual prestación, le asegure menor costo en energía durante toda su vida útil. Con más de 25 años de trayectoria en Argentina, estas etiquetas son ampliamente reconocidas en el mercado y, cada vez, son más los usuarios que se valen de ellas», afirman.
Cómo identificar si la información es veraz
Ahora bien, ¿cómo saber si la información que contienen es veraz? «La única forma de tener esa tranquilidad es si llevan el sello de un organismo de certificación independiente que la respalde (como IRAM) al pie de la etiqueta», informaron.
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De lo contrario, se corre el «riesgo de comprar un producto creyendo de buena fe que es “A”, porque así lo declara la etiqueta por una autodeclaración del fabricante, cuando el consumo energético real es otro, con los costos adicionales que esto puede acarrear en las boletas (electricidad, agua y gas), afectando los presupuestos familiares».
«El acceso a información confiable sobre la EE de los productos es clave para proteger a los consumidores y fomentar decisiones responsables que reduzcan, a su vez, el gasto energético. La certificación es la herramienta que permite una leal comparación de la eficiencia entre diferentes productos, informando parámetros asociados con sus desempeños. De esta manera, funciona como instrumento de lealtad comercial», concluyeron.
Cambios en el etiquetado de eficiencia energética
El Gobierno nacional actualizó las normas de etiquetado de eficiencia energética en Argentina, apuntando a fomentar el consumo eficiente de energía y disminuir las emisiones de dióxido de carbono. La medida, publicada mediante la Resolución 438/2024, establece un reglamento técnico unificado que aplica a productos como electrodomésticos y lámparas, con el objetivo de facilitar a los consumidores la elección de opciones más eficientes y estimular la innovación entre fabricantes e importadores.
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La nueva normativa impone a los fabricantes e importadores la obligación de garantizar el etiquetado correcto, actualizado y visible en todos los productos nuevos que consuman energía. Además, deberán registrar los datos en una base destinada tanto al monitoreo de las autoridades como a la información de los consumidores. Las etiquetas seguirán un formato alfabético de A a G y deberán cumplir con estrictas pautas de diseño y ubicación.
Los plazos para la implementación incluyen un cambio completo de etiquetado para el 5 de marzo de 2026, y la prohibición de comercializar productos con etiquetas desactualizadas para 2028. Esta medida forma parte de las metas nacionales vinculadas a los compromisos climáticos internacionales y busca promover el desarrollo sostenible, la competitividad industrial y la generación de empleo en sectores relacionados con la eficiencia energética.