Alerta por la contaminación de arsénico en el agua de Argentina: cuáles son las zonas en riesgo
El consumo de agua con altos niveles de arsénico puede causar graves problemas de salud, como cáncer de piel, vejiga y pulmón.
El Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) actualizó su Mapa de Arsénico, una herramienta fundamental para monitorear y visualizar la contaminación por arsénico en el agua a lo largo de Argentina. Este proyecto recopila datos de cientos de muestras, proporcionando una visión clara y accesible sobre la calidad del agua en todo el país.
Aunque el arsénico es un elemento presente de forma natural en la corteza terrestre, puede resultar peligroso para la salud humana. El consumo de agua con altos niveles de arsénico durante períodos prolongados puede causar serios problemas de salud, como cáncer de piel, vejiga y pulmón, enfermedades cardiovasculares y daño a órganos como los riñones. Esta condición se conoce como Hidroarsenicismo Crónico Regional Endémico (HACRE).
Cuáles son las zonas en riesgo por arsénico en el agua
Según los expertos, el arsénico puede llegar al agua tanto por procesos naturales, como la disolución de rocas y minerales, como por actividades humanas como la minería, la agricultura y la industria.
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«Las áreas geográficas más damnificadas con este fenómeno son el 70% de la provincia de Buenos Aires, particularmente lo que es el corredor de la ruta 5, como son las localidades de 9 de julio, Bragado, Casares y Trenque Lauquen, y también zonas aledañas a Mar del Plata», detalla Jorge Stripeikis quien lidera el proyecto junto con Jhon Alejandro Ávila.
«Además, se encuentra en todo el sur de Córdoba y Santa Fe y en La Pampa y Mendoza. En el norte, en particular Tucumán, Santiago del Estero, Salta, Chaco y Formosa», agrega.
Según el mapa, más de 4 millones de personas podrían estar expuestas a concentraciones de arsénico que superan los niveles recomendados por la Organización Mundial de la Salud.
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La geología del terreno juega un papel crucial: las zonas con suelos naturalmente ricos en arsénico o aquellas con antecedentes de actividades humanas intensivas, como el uso de pesticidas o prácticas industriales, suelen presentar niveles más altos de este contaminante.
El Mapa del Arsénico está disponible en el siguiente enlace para facilitar el acceso a esta información crucial. Es importante destacar que el proyecto ha contado con una destacada participación ciudadana, quienes aportan muestras del agua que consumen para su análisis.