Desde la agenda 2030 de las Naciones Unidas creada para avanzar hacia un futuro más sostenible y amigable con el medio ambiente, se plantea como uno de los objetivos principales que para dentro de 25 los vehículos eléctricos sean el medio de transporte de uso masivo en el mundo.
Es decir, que la llamada movilidad eléctrica tenga cada vez más relevancia como elección para realizar viajes, tanto en medios públicos como en automóviles en todo el mundo.
En el caso de la Argentina, el reemplazo de vehículos impulsados por combustibles por los que utilizan electricidad para alimentar sus motores se considera incipiente pero también se anticipa que tiene posibilidades de alcanzar un crecimiento masivo en los próximos cinco años.
De este modo, se abren las puertas a un nuevo negocio para la industria automotriz local y, a la vez, se le proporciona a la atmósfera una alternativa más sostenible que la que brindan los combustibles fósiles y contaminantes como la nafta o el diésel.
El proceso de expansión de este nuevo sector es fundamentalmente impulsado por las nuevas generaciones de compradores y conductores, que muestran más conciencia sobre la ecología y el cuidado del planeta y que aseguran que su próximo vehículo será eléctrico.
Si bien la conciencia por el daño ambiental es la principal razón, también lo es el factor económico teniendo en cuenta que ofrecen un importante ahorro en combustible.
Mercado incipiente
En el caso de Argentina, la adopción de esta posibilidad sigue siendo incipiente aunque en la actualidad muestra síntomas de crecimiento, con China como uno de los principales proveedores de unidades, con el ingreso de híbridos (HEV) y un avance de eléctricos urbanos, tal como lo sostiene un documento elaborado por por la Asociación de Concesionarios de la Argentina (ACARA).
El documento plantea un escenario favorable para este 2025, con un “crecimiento significativo”, a partir de iniciativas del propio gobierno liberario de las terminales que operan en el mercado local.
De hecho, se pone como ejemplo la incorporación de buses eléctricos por parte del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y de la reducción de los aranceles que se aplican a la importación de este tipo de modelos, en el marco de medidas que buscan desburocratizar el sector y facilitar el ingreso de más unidades.
Las predicciones para este año hablan de 50.000 vehículos eléctricos e híbridos que se patentarán en Argentina, cifra que incluye un cupo especial con aranceles 0% y de una segunda licitación convocada por el Ministerio de Economía para completar ese cupo en los meses que restan hasta llegar a diciembre.
De alcanzarse, la cifra será muy superior a los 14.175 patentamientos de vehículos híbridos o eléctricos que se lograron en el 2024, gracias a la eliminación de aranceles para que la cantidad se multiplique significativamente, teniendo en cuenta precisamente esa reducción de impuestos para unidades con un valor FOB de hasta u$s16.000.
En la actualidad, el parque circulante local es de unos 36.400 autos electrificados, donde casi el 90% de ellos son vehículos híbridos (HEV) y durante los últimos años ganó mucha participación la hibridación media o mild hybrid (MHEV) de la mano, sobre todo, de las marcas de alta gama que incorporaron esta tecnología como oferta única en sus vehículos.
Asignaturas pendientes
De todos modos, los expertos en el sector todavía hacen mención a una serie de desafíos a enfrentar tanto en aspectos logísticos y de infraestructura como culturales, además de la creación de una red de estaciones de carga de energía renovable y abordar la problemática de las baterías, su autonomía y la disposición al final de su vida útil.
De igual forma, se reclama mayor educación para los conductores en materia de uso sostenible y responsable del vehículo, recordar los riesgos, el mantenimiento de las unidades y hasta consideraciones sobre los seguros.
Otro de los grandes temas atados al crecimiento de la movilidad eléctrica se vincula a la producción de litio, materia prima de las baterías, lo que le brinda ventajas para desarrollar este sector.
Pero mientras estos aspectos son puestos a debate entre los actores de esta industria, la cartera que dirige Luis Caputo acaba de convocar a una nueva licitación para importar más unidades durante los próximos meses.
El proceso es liderado por la Secretaría de Industria y Comercio, que lanzó una nueva convocatoria para la asignación de cupos de importación de vehículos eléctricos e híbridos con arancel cero.
Así lo establece la Resolución 210/2025, firmada por el secretario Esteban Marzorati y publicada este miércoles 11 de junio en el Boletín Oficial de la Nación.
Importar sin aranceles
La medida dispone la distribución de 21.738 unidades para el resto del año, en el marco del régimen especial previsto por el Decreto 49/2025 que efectuó una reducción transitoria de los Derechos de Importación Extrazona para vehículos de motorización alternativa.
Es decir, fijó en 0% la llamada Alícuota de Derechos de Importación para determinados tipos de vehículos, entre los que se ubican como nuevas tecnologías y equipados para la propulsión con motor de émbolo, de encendido por chispa, con motor eléctrico, aquellos preparados para ser cargados mediante conexión a una fuente externa de alimentación eléctrica, entre otros.
En el caso de la norma publicada recientemente, se establece que, además de tener un precio menor a u$s16.000 FOB (libre de impuestos y gastos) en el puerto de salida, los autos deben cumplir con otras dos condiciones esenciales para obtener la aprobación como ser híbridos o eléctricos e ingresar al país antes del 31 de enero del 2026.
De tener éxito la licitación, los nuevos autos importados se sumarán a los 28.262 que ya fueron asignados en una primera convocatoria. Es decir, se llegaría al cupo anual de 50.000 vehículos habilitados para ingresar al país bajo este beneficio arancelario.
Cómo se reparte el cupo
En este sentido, la resolución detalla que de las 21.738 unidades disponibles, 15.715 se destinarán a terminales radicadas y con producción en Argentina, mientras que 6.023 corresponderán a personas jurídicas que no cumplan con esa condición.
“Todo aquel cupo, correspondiente a la Primera Convocatoria, que se libere, se sumará a la totalidad de unidades previstas en la presente medida y podrá ser asignado con los criterios y la proporcionalidad prevista”, aclara el texto.
En cuanto al formato para distribuir las unidades, la norma establece un mecanismo que tomará en cuenta el menor precio de lista de venta al público comprometido y la fecha estimada para la nacionalización de los vehículos para que, en caso de igualdad de valores, se priorice la fecha más próxima de nacionalización declarada.
“Las solicitudes de cupo se otorgarán según el precio de lista de venta al público en dólares estadounidenses, siguiendo un orden de prelación desde el más bajo al más alto”, detalla la norma.
Del mismo modo, aclara que las terminales “deberán presentar sus solicitudes exclusivamente a través de la plataforma electrónica “Trámites a Distancia” (TAD) en un plazo de 10 días hábiles a partir de la publicación de la resolución”.
Para poder participar del proceso, las empresas tendrán que entregar una declaración jurada de cumplimiento de las normas de seguridad vehicular y de las condiciones establecidas en la Ley 24.449 de Tránsito y la Ley 24.240 de Defensa del Consumidor.
La resolución también establece que los cupos liberados por renuncia o por no cumplimiento de nacionalización “serán reasignados a los solicitantes que hayan cumplido con los requisitos y no hayan recibido cupo o hayan recibido uno inferior al solicitado, respetando el orden de prelación”.
Ampliar la oferta sustentable
Según expertos consultados, la medida responde a la actualización de las posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del Mercosur (N.C.M.) realizada por la Dirección General de Aduanas y a la necesidad de completar el cupo anual previsto por el gobierno de Javier Milei.
Se aclara además que el llamado a esta licitación “únicamente se limita a la asignación de cupos para aquellos solicitantes constituidos como personas jurídicas, cuya finalidad sea la comercialización de los vehículos alcanzados por el régimen, en observancia con las obligaciones establecidas en las Leyes Nros. 24.240 de Defensa del Consumidor y 24.449 de Tránsito”.
El proceso tiene como objetivo ampliar la oferta de movilidad sustentable y facilitar el acceso a precios más competitivos en lo que los expertos califican como un mercado “chico y caro” como el de la movilidad eléctrica, con una oferta que todavía es escasa y costosa.
De hecho, informes privados estiman que en los primeros seis meses de este 2025, solamente se patentaron 9.030 unidades que representan el 3% del total, con un segmento de autos cuyos precios oscilan en los u$s40.000 en concesionarias.
La licitación anterior, cerrada en marzo pasado distribuyó los cupos entre BAIC (Belcastro); Jetour y Lifan (Famly Argentina); Chery y JAC; Changan (Car One); BYD y Leapmotor.
En los fundamentos de la Resolución 210/2025 se admite la conveniencia de “formalizar un nuevo llamado a convocatoria para asignar el remanente del cupo no utilizado, de conformidad a las previsiones contempladas en la Resolución N° 29/25 de la SECRETARÍA DE INDUSTRIA Y COMERCIO y la presente medida”.
Se aclara además que “todo aquel cupo, correspondiente a la Primera Convocatoria, que se libere se sumará a la totalidad de unidades previstas en la presente medida y podrá ser asignado con los criterios y la proporcionalidad prevista”.
Y en el supuesto que quede un remanente en una de las categorías, se lo podrá asignar a solicitantes de la otra categoría y si a un interesado se le vence una parte o todo el cupo asignado, se lo podrá reasignar a otro en esta misma convocatoria.
“Los cupos liberados, por renuncia o no cumplimiento de nacionalización, serán reasignados a los solicitantes que, habiendo cumplido con los requisitos de admisibilidad y evaluación establecidos en la reglamentación y en el presente llamado, no se le hubieran asignado cupos o hubieran recibido uno inferior al solicitado, conforme al orden de prelación originalmente determinado que surge del acto de asignación”, detalla la norma.