En un contexto global de creciente debate sobre los efectos del turismo, un informe reciente de Booking.com revela que el 53% de los argentinos reconoce el impacto que sus viajes tienen en las comunidades y el medioambiente.
A pesar de valorar positivamente la llegada de visitantes, muchos residentes locales advierten sobre problemas asociados, como la congestión vehicular (35%), la acumulación de residuos (48%) y el encarecimiento del costo de vida (25%).
El estudio, titulado Viajes y Sostenibilidad 2025, encuestó a 32.000 personas en 34 países, incluidos 1.000 argentinos, y pone de manifiesto una tendencia: los viajeros desean tener un rol más consciente y responsable. De hecho, el 67% de los argentinos consultados afirma que quiere “dejar los lugares mejor de lo que los encontró”.
Sin embargo, ante los problemas detectados, solo el 10% cree que se debería limitar el número de turistas. En cambio, la mayoría propone soluciones estructurales: invertir en mejoras de transporte (38%), en gestión de residuos (48%) y en protección ambiental (38%).
Los resultados también reflejan que más de la mitad de los argentinos considera que los turistas suelen respetar las costumbres locales (50%) y apoyan a los negocios del lugar (57%). Esa mirada positiva se alinea con sus propias prioridades como viajeros: el 72% busca que el dinero invertido regrese a la comunidad y el 76% elige experiencias auténticas vinculadas a la cultura local.
A nivel global, el informe muestra un cambio profundo en los hábitos de viaje: el 93% de los encuestados asegura querer viajar de forma más sustentable en 2025. Este comportamiento no solo incluye reducir residuos o consumo energético, sino también evitar la masificación de destinos tradicionales (42%) y elegir épocas menos concurridas para viajar (47%).
“La infraestructura y la innovación deben ir al ritmo de las buenas intenciones de los viajeros”, aseguró Danielle D’Silva, directora de Sustentabilidad de Booking.com, y destacó el potencial de la inteligencia artificial y otras tecnologías para “conectar a los viajeros con una mayor diversidad de comunidades y así amplificar el impacto positivo del turismo”.