Un informe del Climate Action Tracker (CAT), presentado en la COP30, concluye que si los gobiernos implementaran tres medidas climáticas el mundo podría lograr un recorte de 18.000 millones de toneladas de CO₂ para 2035 y reducir el calentamiento proyectado hacia fin de siglo de 2,6°C a 1,7°C.
Cuáles son las 3 acciones clave
Triplicar las energías renovables, duplicar la eficiencia energética y reducir las emisiones de metano de aquí a 2030, son las tres acciones clave que determinó el informe.
El análisis sostiene que estas acciones, parte central del primer Global Stocktake (GST) acordado en la COP28, permitirían disminuir la tasa de calentamiento global en un tercio hacia 2035 y a la mitad para 2040. Esto sería clave para dar margen a la adaptación, especialmente en regiones vulnerables donde los efectos del cambio climático ya son severos.
Según el CAT, cumplir estos compromisos permitiría lograr un avance climático casi equivalente al progreso registrado en la última década desde la firma del Acuerdo de París, donde las proyecciones de calentamiento bajaron aproximadamente 1°C gracias a políticas y compromisos más ambiciosos. Sin embargo, para que este nuevo salto ocurra, los gobiernos deben actuar de inmediato y sostener medidas más allá de 2035.
Menos desforestación
En la COP28, los países acordaron triplicar la capacidad global de energías renovables, duplicar las mejoras en eficiencia energética y reducir las emisiones de metano, un gas de efecto invernadero que genera un fuerte impacto en el corto plazo. Estos compromisos, junto con la necesidad urgente de frenar la deforestación, forman el núcleo de la agenda de acción de la presidencia de la COP30 en Belém.
“Si los gobiernos llevaran a cabo lo que ya prometieron, podríamos evitar un escenario de caos climático y disminuir significativamente la velocidad a la que se calienta el planeta”, afirmó Bill Hare, CEO de Climate Analytics. Para el experto, la clave está en la voluntad política y en el apoyo financiero que los países más pobres necesitan para implementar esta transición a la escala requerida.
El informe también detalla el rol central del G20, responsable del 80% de las emisiones globales. Triplicar las energías renovables en estas economías representaría el 40% de la reducción total de emisiones, mientras que duplicar la eficiencia energética sumaría otro 40%. La mitigación del metano aportaría el 20% restante, pero con un efecto desproporcionado en la reducción del ritmo del calentamiento debido a su fuerte impacto inmediato en la atmósfera.
La combinación de estas medidas aceleraría la transición energética, impulsaría la electrificación de sectores clave como la industria y el transporte, y generaría beneficios climáticos inmediatos. De lograrse, sería uno de los hitos más significativos desde París y podría mantener vivo el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5°C.