Ubicado en el centro de China, específicamente en la provincia de Sichuan, se encuentra el Parque Nacional Jiuzhaigou, un verdadero paraíso natural conocido por sus impresionantes bosques, cascadas, lagos y montañas que parecen sacadas de un cuento de hadas.
Dentro de este parque, el «Five Flower Lake» o «Lago de los Cinco Colores» destaca como un espejo de agua fascinante, cuyas aguas transparentes y matizadas forman una variedad de tonalidades.
Al ser parte del parque nacional, el lago es reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y como Reserva Mundial de la Biosfera, según lo señalado por The Global Alliance of National Parks.
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En su superficie, flotan flores que suman a la paleta de colores, y su belleza se vuelve aún más cautivadora en otoño, cuando las hojas se tornan de un vibrante tono naranja, creando reflejos encantadores en el agua.
La fauna del «Lago de los Cinco Colores»
El valle de Jiuzhaigou, que literalmente significa «Valle de las Nueve Aldeas», alberga nueve aldeas tibetanas distribuidas a lo largo de 720 kilómetros.
Este paraíso natural es el hogar del oso panda gigante, una especie única en China y en peligro de extinción en su hábitat natural.
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También residen en la zona el mono dorado de Sichuan, osos panda «comunes» y varias especies de ciervos. Además, la reserva alberga aves como los faisanes dorados y las grullas, que añaden elegancia a este entorno.
Así, el Parque Nacional Jiuzhaigou no solo cautiva con sus lagos cristalinos, sino que también ofrece cascadas impresionantes, senderos para caminatas entre las montañas y una flora y fauna únicas.