La construcción en seco, a través de sistemas como Wood Frame y Steel Frame, está cambiando la forma de edificar al reemplazar cemento, ladrillos y mortero húmedo. Este método acelera notablemente los tiempos de obra y abre paso a alternativas cada vez más demandadas, como las Tiny Houses.
Un ejemplo concreto se encuentra en plataformas de e-commerce: en Mercado Libre, por caso, se ofrece un modelo de 24 metros cuadrados por 22.000 dólares.
Cuáles son las ventajas de las Tiny Houses
A diferencia de la construcción tradicional, que puede extenderse durante meses o incluso años, las Tiny Houses se fabrican en talleres o fábricas bajo condiciones controladas.
Posteriormente, se transportan al terreno y se ensamblan en pocos días o semanas. Esta modalidad reduce costos, optimiza el uso de materiales y disminuye la generación de residuos, logrando un menor impacto ambiental.
Además, su carácter modular y acoplable permite comenzar con un espacio base y expandirlo con nuevos ambientes -habitaciones, baños, un living más amplio o una cochera- según evolucionen las necesidades y el presupuesto. Los módulos ofrecen gran versatilidad en diseño: pueden personalizarse con distintos acabados y fachadas, y en muchos casos los compradores cuentan con el asesoramiento de arquitectos y diseñadores de interiores.
Tiny Houses: eficiencia, flexibilidad y sustentabilidad
Otra ventaja es la posibilidad de acceder a viviendas bajo la modalidad “llave en mano”, listas para habitar, o bien optar por versiones “semi-terminadas”, que incluyen la estructura exterior completa y dejan los interiores a elección del propietario. Esta modalidad híbrida brinda flexibilidad financiera y la oportunidad de involucrarse activamente en la personalización del hogar.
En síntesis, las Tiny Houses representan una solución habitacional que combina rapidez, flexibilidad y sustentabilidad, ofreciendo alternativas adaptables a diferentes estilos de vida.