Dos jóvenes diseñadores desarrollaron un sistema de ladrillos capaz de refrescar el aire en paradas de transporte, patios escolares y plazas, sin depender de la electricidad convencional.
bloc°: un sistema modular para refrescar espacios públicos
bloc° es una solución de refrigeración modular alimentada por energía solar que combina terracota y el principio de enfriamiento por evaporación para hacer más habitables los espacios urbanos durante episodios de calor extremo. A diferencia de otras alternativas, no genera ruido, no necesita infraestructura compleja y no suma carga a redes eléctricas ya saturadas. Es, básicamente, dejar que la física haga lo suyo.
Los ladrillos modulares de terracota son el corazón del sistema. Están diseñados para apilarse y adaptarse a distintos entornos urbanos: desde plazas sin sombra hasta paradas improvisadas en la calle o andenes de tranvía donde el calor se vuelve insoportable.
Refrigeración natural con agua, aire y sol
El atractivo de bloc° no radica solo en su estética -una combinación de artesanía tradicional y tecnología contemporánea- sino en la precisión con la que aprovecha materiales porosos, el movimiento del aire y la evaporación para disminuir la temperatura del entorno inmediato. La terracota, fabricada mediante impresión 3D, maximiza su superficie interna para permitir que el agua almacenada en cada módulo se evapore lentamente.
Ese proceso de evaporación extrae calor del aire, reduciendo algunos grados la temperatura ambiente. Lo suficiente para transformar un lugar inhabitable en un pequeño refugio urbano. Un banco que antes nadie ocupaba por el calor extremo puede convertirse en un espacio agradable donde esperar sin sufrir.
El sistema incorpora pequeños paneles solares que alimentan microbombas de recirculación, manteniendo la humedad del ladrillo sin necesidad de conexión eléctrica. Funciona de manera autónoma: se autoabastece y rinde mejor cuanto más fuerte pega el sol.
Confort térmico incluso en días extremos
Las olas de calor, que antes duraban apenas unos días, ahora se extienden durante semanas, dejando los espacios públicos casi inutilizables si no se interviene.
En un entorno urbano típico, un módulo bloc° puede integrarse al mobiliario existente -bancos, separadores, pérgolas pequeñas- y ampliarse según la necesidad. Puede tratarse de unos pocos bloques para refrescar un rincón puntual o de estructuras más grandes para plazas sin sombra y patios escolares. Son intervenciones discretas, sin un impacto visual invasivo, pero con un efecto térmico significativo.
Una intervención sutil y minimalista
En las paradas de transporte público -sobre todo en las de superficie- la exposición al sol es constante. El asfalto caliente, el tráfico y la falta de sombra generan microclimas casi insoportables. En esos entornos, bloc° aporta una mejora directa del confort térmico sin necesidad de cubrir toda la zona ni instalar equipos mecánicos.
Gracias a su diseño modular, puede adaptarse a espacios angostos y aprovechar el flujo de aire que provocan los autobuses o tranvías al pasar, potenciando el proceso de evaporación. Es un punto de frescor que vuelve la espera más tolerable, especialmente para personas mayores o con problemas de salud.
Terracota impresa en 3D: la pieza clave
La elección de la terracota impresa en 3D responde más a la funcionalidad que a la estética. Este método permite crear microcanales, curvas y porosidades que no serían posibles con técnicas tradicionales, optimizando la absorción de agua, la evaporación y la circulación del aire.
Además, la terracota es un material abundante, de baja huella ambiental, totalmente reciclable y resistente al sol. No es tóxica, no se degrada y mantiene propiedades térmicas estables durante décadas. Se integra al paisaje urbano sin parecer un artefacto tecnológico invasivo.
Este tipo de materiales está ganando protagonismo en proyectos europeos de adaptación climática y remite a soluciones ancestrales del Mediterráneo y Oriente Medio, donde la cerámica se usó durante siglos para refrescar interiores. Es, en esencia, una tecnología antigua reinterpretada con herramientas actuales.
Cuál es el potencial de este método innovador
bloc° se alinea con una tendencia global: ciudades que buscan adaptarse al calor sin depender exclusivamente del aire acondicionado. Y lo hace apoyándose en recursos simples -materiales minerales, evaporación y energía solar- para generar espacios más habitables.
Su potencial se despliega en tres ejes:
- Transformar el mobiliario urbano en infraestructura climática. Bancos, postes, muros bajos y otros elementos pueden convertirse en sistemas pasivos de refrigeración.
- Proteger a quienes más lo necesitan. Paradas de transporte, patios escolares, zonas para personas mayores o áreas de trabajo al aire libre pueden beneficiarse de soluciones de bajo costo y mínimo mantenimiento.
- Impulsar la resiliencia local. Sistemas como bloc° permiten que las ciudades respondan al calor extremo sin aumentar su dependencia de redes eléctricas ya tensionadas por la demanda de aire acondicionado.