Impulsan un proyecto clave para reciclar baterías de litio en Argentina

Investigadores del CONICET La Plata lanzan un protocolo para la recolección y el acopio de baterías de litio agotadas

Con el protocolo para la gestión segura y sustentable en marcha, ahora la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y el Ministerio de Ambiente de la provincia de Buenos Aires firmaron un convenio con para poner en marcha un innovador proyecto de investigación sobre reciclaje de baterías de litio.

La iniciativa que se llama “Evaluación tecnológica para la separación del material cátodo y ánodo de baterías ión-Li”, apunta a recuperar materiales estratégicos como el litio, el cobre y el aluminio, promoviendo una gestión ambientalmente responsable.

Cómo es el acuerdo para la gestión de baterias de litio

El acuerdo involucra a la planta UniLib, la primera fábrica de celdas y baterías de litio de América Latina, impulsada por la UNLP junto a Y-TEC. Allí se analizarán tecnologías para reciclar baterías del tipo LFP (litio-hierro-fosfato), utilizando procesos de lixiviación que permitan separar y recuperar componentes con valor agregado, explicaron desde la UNLP en un comunicado de prensa.

Impulsan un proyecto clave para reciclar baterías de litio en Argentina.

Participaron del acto el vicepresidente Académico, Fernando Tauber; la vicepresidenta Institucional, Andrea Varela; la ministra de Ambiente bonaerense, Daniela Vilar; el decano de la Facultad de Ciencias Exactas, Mauricio Erben; el investigador Jorge Sambeth; y otras autoridades del ámbito científico y universitario.

Trabajo colaborativo

Tauber celebró el compromiso institucional: “Es un convenio importante, en defensa de la calidad de vida de los bonaerenses, es una enorme responsabilidad tener los conocimientos y no usarlos, por eso la universidad debe resolver los problemas de nuestra sociedad”. También destacó la articulación con el Estado provincial: “Es fundamental tener una estrategia en común con la provincia”.

Y fue más allá al afirmar: “Tener la primera planta de batería de litio de Latinoamérica es mucho más que un proyecto científico, es un proyecto político. La ciencia argentina tiene la capacidad de agregar valor al litio y eso es lo que demuestra esta fábrica”.

Andrea Varela, por su parte, expresó que este tipo de acuerdo «es una esperanza para seguir exponiendo nuestro conocimiento para que la vida de los compatriotas sea mejor”, y agradeció a la cartera ambiental por el trabajo conjunto».

Erben remarcó la vocación de transferencia de conocimiento de su facultad. Sambeth, responsable del proyecto, explicó: “La idea fue pensar qué hacemos con las baterías de UniLib cuando se desgasten. Recuperar el litio, el cobre, las láminas de aluminio y ver qué se puede hacer con los fosfatos y polímeros. Nos estamos adelantando 25 años”.

La ministra Vilar subrayó la calidad del sistema universitario: “En esta Universidad hay profesionales de gran envergadura trabajando para un futuro mejor. Gracias al sistema universitario de la provincia y a la UNLP contamos con datos estadísticos que no teníamos antes. Por ejemplo, con la UNLP estamos realizando el inventario de humedales”.

El proyecto adquiere relevancia estratégica: aunque Argentina posee la tercera mayor reserva mundial de litio, países como China y Estados Unidos -con reservas inferiores- lo importan por su valor geopolítico. Frente al aumento de baterías desechadas, el reciclaje se convierte en una prioridad tecnológica y ambiental.

El acuerdo se fundamenta en principios constitucionales que promueven un ambiente sano y obligan a conservar los recursos naturales. Desde la Dirección Provincial de Transición Ecológica se remarcó que “la principal problemática ambiental es la desigualdad” y que es necesario un desarrollo que articule producción y conservación.

C M: Notas sobre negocios y sustentabilidad.