Mukhtar Babayev, presidente de la pasada COP29 celebrada en Bakú, advirtió que recortar fondos destinados al cambio climático y al desarrollo es una «decisión miope». En ese sentido, destacó la importancia de la Conferencia sobre Financiación para el Desarrollo, que se celebrará a finales de mes en Sevilla (sur de España), subrayando que «llega en un momento crítico».
La advertencia de Mukhtar Babayev sobre el presupuesto para el cambio climático
Babayev, actual representante presidencial especial para Asuntos Climáticos de Azerbaiyán y exministro de Ecología y Recursos Naturales, participa esta semana en la Conferencia sobre el Clima en Bonn (Alemania), que sienta las bases de cara a la próxima COP30, prevista en noviembre en Belém (Brasil).
En una entrevista con EFE, compartió sus expectativas sobre la cita en Bonn y la conferencia de Sevilla, que se celebrará del 30 de junio al 3 de julio.
Respecto a la agenda de Bonn, expresó su confianza en que las partes logren «avances significativos» en el apoyo a la transición energética, incluyendo conversaciones centradas en metas como triplicar la capacidad de energías renovables y acelerar la acción climática durante esta década decisiva.
Babayev adelantó que se abrirá un proceso de diálogo con gobiernos y sociedad civil para trabajar en la llamada «hoja de ruta de Bakú a Belém», orientada a alcanzar el objetivo climático de financiar con 1,3 billones de dólares (1,1 billones de euros anuales) a los países en desarrollo, una meta acordada en la COP29.
Según explicó, las sesiones en Bonn serán clave para definir opciones viables que permitan alcanzar esa meta financiera.
Finalmente, reiteró que la Conferencia de Sevilla será especialmente relevante dada la coyuntura actual y los retos pendientes en materia de financiación para el desarrollo.
En referencia a la COP29 que presidió, Mukhtar Babayev recordó que en esa cumbre se acordó destinar anualmente 300.000 millones de dólares (250.000 millones de euros) en financiación climática para países en desarrollo hasta 2035, una medida que calificó como una «decisión histórica».
Sin embargo, lamentó que «en lugar de reforzar ese compromiso, los donantes comenzaron 2025 retrocediendo», con recortes presupuestarios destinados al desarrollo en diversas partes del mundo.
Babayev criticó esta tendencia, asegurando que «quitarle recursos al desarrollo y al clima es una decisión miope», y subrayó que «cada dólar invertido en estas áreas representa una apuesta por nuestro futuro común».
Advirtió también que, aunque este año debería marcar el inicio de una «década de implementación climática», eso no será posible si no se cumplen los compromisos financieros. Por ello, consideró «urgente» duplicar la financiación antes de que finalice el año.
Cuenta regresiva para la COP30
«Azerbaiyán estará en Sevilla para defender la financiación climática y exigir que los países cumplan con las promesas asumidas», aseguró el representante, de cara a la COP30.
En cuanto a los avances logrados en Bakú, Babayev destacó la adopción de un nuevo objetivo para multiplicar por seis la capacidad de almacenamiento energético global respecto a los niveles de 2022.
Además, mencionó que se lanzaron compromisos concretos sobre el desarrollo del hidrógeno y las zonas de energía verde, iniciativas que, según explicó, «contribuirán a crear un sistema energético preparado para la expansión masiva de las energías renovables».
«Así es como nuestra ‘agenda para la acción’ apoyará una transición justa, equitativa y ordenada desde los combustibles fósiles hacia un nuevo modelo energético», concluyó.