La provincia de Córdoba refuerza su liderazgo en energías renovables con la inauguración de la ampliación de la planta de Bio4 en Río Cuarto. La obra, impulsada por un consorcio de empresas agroindustriales, demandó una inversión de $30.000 millones y marca un hito en la región, al potenciar la producción, el empleo y la sostenibilidad energética.
La expansión incorporó infraestructura de última generación: una nueva torre de molienda capaz de procesar 50.000 kg de maíz por hora, un sistema de licuefacción de 340 mil litros, y un complejo de fermentación con dos tanques de un millón de litros cada uno, además de dos de propagación. También se sumaron dos unidades centrífugas para la separación de sólidos, fundamentales en la producción de biocombustibles. Gracias a esta capacidad operativa, Bio4 consolida su rol estratégico en la economía local, donde ya genera más de 200 empleos directos.
Con 13 años de trayectoria, la firma está integrada por 28 socios agropecuarios que apostaron por transformar el maíz de la región en bioetanol y subproductos para la nutrición animal y otras industrias.
Bioetanol: energía limpia y valor agregado
El bioetanol es un alcohol etílico obtenido a partir de la fermentación de azúcares y almidones presentes en biomasa vegetal como maíz o caña de azúcar. Su gran ventaja frente a los combustibles fósiles es su baja o nula huella neta de carbono: el CO2 que se libera en su producción y uso es el mismo que previamente capturaron las plantas mediante fotosíntesis.
Además de reducir emisiones, el bioetanol:
- Diversifica la matriz energética y reduce la dependencia de hidrocarburos.
- Impulsa la economía circular al generar subproductos de alto valor, como la burlanda para nutrición animal.
- Promueve el desarrollo regional, al transformar materias primas locales en productos de mayor valor agregado.
En Argentina, la ley 27.640 establece que las naftas deben mezclarse con un 12% de bioetanol: un 6% proviene del maíz -mayoritariamente cordobés- y otro 6% de la caña de azúcar del NOA.
Un modelo asociativo con visión de futuro
El caso de Bio4 refleja un modelo empresarial basado en el asociativismo y la economía circular, con foco en descarbonizar la matriz energética y generar un desarrollo productivo sostenible. “No es solo una inversión en infraestructura, es una apuesta por la transición energética y el futuro de la región”, destacó Manuel Ron, presidente de la compañía.
La ampliación también dio marco a la apertura del Parque Industrial y Logístico Bioetanol Río Cuarto, que ya alberga nueve empresas: cuatro en operación, dos en construcción y tres en etapa de proyecto, consolidando un nuevo polo productivo vinculado al sector.