Cuáles son los “objetivos core” de una de las mayores transportadoras de gas de la Argentina

Para consolidar la senda de estabilización y promover el crecimiento a largo plazo en el sector de los hidrocarburos, el gobierno nacional implementó varias medidas, entre las que se destaca la creación del denominado Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI) con promociones impositivas, aduaneras y cambiarias.

Entre otros objetivos, esta decisión busca reducir las restricciones cambiarias que impactan sobre la circulación de capitales, intentando mejorar el clima de negocios para inversiones en infraestructura, en especial las orientadas al desarrollo del reservorio de Vaca Muerta, ubicado en la Cuenca Neuquina.

Cuáles son los “objetivos core” de una de las mayores transportadoras de gas de la Argentina

Para las autoridades de la administración libertaria, este escenario abre nuevas oportunidades de inversión e infraestructura energética y revitalizan la integración regional, al tiempo que estimulan las exportaciones hidrocarburíferas y mineras.

Una de las empresas del sector que más fuerte viene apostando al nuevo contexto es Transportadora de Gas del Norte (TGN), una sociedad que opera ductos y es proveedora de soluciones para proyectos energéticos.

Titular de una licencia para la prestación del servicio público esencial de transporte de gas natural por gasoductos de alta presión, la empresa tiene derecho exclusivo para operar dos sistemas de gasoductos en las regiones Norte y Centro-Oeste de la República Argentina.

Su capital accionario está en un 56% en manos de la sociedad Gasinvest, conformada a su vez por la petrolera y por la Compañía General de Combustibles, del grupo también dueño de Corporación América.

En tanto otro 24% es propiedad de Southern Cone Energy Holding Company, mientras que el 20% restante flota en las bolsas y mercados locales (BYMA).

Gigante del transporte de gas

En la actualidad, TGN opera 11.000 kilómetros de gasoductos; posee 21 plantas compresoras; transporta el 40% del gas total que se envía por los gasoductos; lleva invertidos más de u$s1.500 millones y da trabajo a 700 empleados directos.

Su red de gasoductos es la más grande del país y atraviesa 17 kilómetros, además de ser la única operadora que se vincula a nivel regional con Chile, Brasil, Bolivia y Uruguay.

TGN opera 11.000 kilómetros de gasoductos.

La empresa no recibe subsidios económicos otorgados por organismos estatales y está regulada por la Ley N° 24076, conocida como “Ley del Gas”, cuya autoridad de aplicación es el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS).

En abril pasado, la compañía envió un pedido de ampliación de su concesión al Enargas por otros 10 años, en los términos del artículo 6° de la Ley 24.076 y su Decreto Reglamentario 1738/92, o por el mayor plazo que se establezca en cualquier reforma legislativa, tal el caso del proyecto de Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos que contempla un plazo de 20 años.

Mientras espera una respuesta favorable, como la que ya tuvo Transportadora de Gas del Sur (TGS) al mismo reclamo, el directorio de TGN comenzó a delinear un plan relativo a su evolución comercial, operativa, financiera, que también abarca estrategias para convivir con nuevas regulaciones aplicadas por la gestión libertaria en el negocio en el que se desempeña.

Desafíos y oportunidades

La estrategia se completa con políticas y sistemas de gestión que desarrollan y evalúan actividades de calidad, seguridad, ambiente, salud, prácticas laborales e impactos sociales, tanto internos como en la cadena de valor.

En este sentido, la gestión de responsabilidad social de la compañía focaliza sus esfuerzos en incorporar los temas sociales y ambientales vinculados a sus procesos centrales de operación.

TGN reconoce que los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), establecidos por Naciones Unidas en 2015, representan tanto desafíos como oportunidades para el desarrollo de negocios dentro de su cadena de valor.

TGN reconoce que los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), establecidos por Naciones Unidas en 2015, representan tanto desafíos como oportunidades para el desarrollo de negocios dentro de su cadena de valor.

Sus ejecutivos saben que las metas del organismo internacional invitan a implementar políticas, metas e indicadores que permitan avanzar hacia un desarrollo más sostenible, brindando a cada sector la posibilidad de contribuir desde sus estrategias y prácticas a través de la llamada Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que integra dimensiones económicas, sociales y ambientales esenciales para abordar los retos globales actuales.

Aunque los ODS son un compromiso asumido por los Estados, el sector privado también desempeña un papel clave en su cumplimiento por lo cual en TGN llevaron a cabo un estudio a los efectos de detectar cuáles son los objetivos de desarrollo sostenible que poseen una estrecha relación con su negocio.

Son los denominados “objetivos core”, que se refieren a la sostenibilidad del negocio, así como a la sostenibilidad social y ambiental:

  • ODS 4: Desarrollo De Competencias Técnicas. Educación De Calidad.
  • ODS 5: Igualdad Entre Géneros.
  • ODS 10: Inclusión Social, Diversidad.
  • ODS 11: Comunidades Sostenibles.
  • ODS: 16: Gobernanza, Anticorrupción

Avanzar con la descarbonización

La empresa también creó diferentes espacios de trabajo que funcionaron en el ámbito del Comité de Dirección y con la participación de diversas áreas de la compañía para alinear y priorizar hojas de ruta que apuntan a mejorar las prácticas que se relacionan con los ejes de materialidad social y ambiental del negocio.

Con relación al compromiso con la transición energética, se comenzó la identificación de brechas y el potencial impacto en la operación de la regulación argentina y de los compromisos de descarbonización asumidos por el país.

Con relación al compromiso con la transición energética, se comenzó la identificación de brechas y el potencial impacto en la operación de la regulación argentina y de los compromisos de descarbonización asumidos por el país.

En TGN creen en un modelo energético que avance hacia la descarbonización, pero sin dejar a nadie atrás, al que llaman “camino de transición justa”, y en el cual el gas natural tiene un rol estratégico, obligando a la empresa a trabajar para que su aporte sea cada vez más eficiente, seguro y en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Hasta ahora, el cálculo de la huella de carbono de las operaciones de transporte de gas de TGN revela que, por cada millón de metros cúbicos de gas transportado, en las condiciones operativas del período 2024, se emitieron a la atmósfera 63 toneladas de CO2 equivalentes.

En este sentido, desde el 2020 la empresa contabiliza las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) mediante el Inventario basado en el Protocolo GHG, considerando los alcances 1 y 2 que, como resultado, demuestra que las principales emisiones se originan en los gases de combustión liberados por los equipos de compresión y generación eléctrica, principalmente CO2 con un 73 % del total de GEI emitidos.

Por otra parte, las fuentes de GEI se complementan con un 27% de emisiones de gas natural (principalmente metano), proveniente de la operación de los equipos compresores, las emisiones fugitivas y las originadas en los venteos de seguridad en plantas compresoras y gasoductos.

Desde el 2020 la empresa contabiliza las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI).

En el marco de este compromiso ambiental, sus ejecutivos trabajan en el desarrollo de estrategias destinadas a reducir la huella de carbono, especialmente en lo que respecta a emisiones de gas metano.

La empresa reconoce que, aunque las emisiones GEI de Argentina y la región sean poco significativas a nivel global, resulta fundamental dedicar todos los esfuerzos posibles a la mitigación de los impactos causados por la actividad humana en el clima.

Por eso, el año pasado la empresa incorporó al inventario las emisiones fugitivas de metano derivadas del funcionamiento de válvulas reguladoras, muchas de las cuales se originan en las estaciones de medición y regulación.

Despacho eficiente de gas

De acuerdo a un reporte recientemente publicado por la compañía, “dentro del proceso de mejora del inventario, los volúmenes de gas natural emitidos durante los arranques de los equipos turbocompresores se calcularon mediante mediciones in situ y se dejaron de utilizar entonces métodos teóricos con índices sugeridos por los fabricantes”.

En el documento se puede observar que los gases de combustión (principalmente CO2) de los equipos turbocompresores, como en períodos anteriores, son la fuente con mayor contribución, representando una proporción dominante del total de emisiones, con una representación del 58% del total.

Instalaciones de la planta compresora San Jeronimo

En este sentido, TGN viene impulsando medidas operativas de despacho eficiente de estos equipos que resultan imprescindibles para la compresión del gas natural en el sistema de transporte.

Por otra parte, se advierte que el gas natural, principalmente metano (CH4) de sello hidráulico de equipos compresores, representa el 16% del total, siendo la segunda fuente de emisión en importancia y la principal emisión de CH4.

La tercera está signada por el 14% proveniente de los gases de combustión de equipos motogeneradores y motocompresores, mientras que las emisiones fugitivas de CH4 aportan con un 7% al inventario, y son la segunda fuente de emisión de CH4.

Al mismo tiempo, los venteos de gas natural, tanto operativos como de seguridad, cuentan con objetivos de reducción de emisiones de metano a través de la implementación de mejoras de gestión y planificación operativa que le permitieron obtener reducciones significativas y explicar que, en la actualidad el metano se ubica como quinta fuente de emisión con un 4% de participación en el inventario y como tercera fuente en importancia de emisiones directas de CH4.

Como parte de este proceso, TGN desplegó una serie de medidas vinculadas a profundizar sus objetivos de cuidado del medio ambiente pero sin desatender su cores business:

  1. Actualización de benchmarking en materia regulatoria sobre la Gestión de Venteos de Gas Natural, con el respaldo de un consultor internacional, frente a cambios en normativa europea aplicable.
  2. Mejoras en el proceso de Gestión de Venteos, que redunda en progresos sobre resultados para esta fuente, como se refleja en el inventario de emisiones GEI.
  3. Desarrollo de herramientas para la tarea de registro y seguimiento, y la planificación de operativos con venteo en el Plan Anual y Quinquenal de Proyectos.
  4. Ampliación de estudio de alternativas técnicas para la reducción de emisiones GEI en operativos con venteo en gasoductos de transporte dentro del Plan de Proyectos,y desarrollo de especificación técnica para la adquisición de equipos particulares.
  5. Incorporación de mejoras en la contabilidad de las emisiones GEI, además de nuevas fuentes de emisiones, y mejoras en la gestión y gobernanza de datos.

Evaluar los riesgos

Otra decisión central de cara al futuro fue la creación del Comité ASG (Ambiental, Social y Gobernanza) que le reporta directamente al CEO de la compañía y al Directorio y que impulsa la agenda de trabajo de la compañía en diversas hojas de ruta trazadas sobre las diferentes materialidades críticas, de interés para nuestra empresa como parte de la industria del Oil & Gas.

Una de esas tareas es la de evaluar los riesgos en el marco de cada proyecto, poniéndose en consideración criterios de diseño, implementación y actividades regulares de la operación del sistema de ductos.

El método de evaluación toma en consideración los Principios Rectores de Derechos Humanos y Empresas de Naciones Unidas y se analizan diferentes escenarios vinculados a la aplicación de potenciales mecanismos de financiamiento, con el propósito de avanzar en el plan de proyectos.

Otra decisión central de cara al futuro fue la creación del Comité ASG (Ambiental, Social y Gobernanza) que le reporta directamente al CEO de la compañía y al Directorio

El año pasado, se delinearon propuestas de esquemas de incentivo para proyectos con impacto ambiental positivo que fueron presentadas a la autoridad regulatoria.

Además, la empresa participó de la discusión pública sobre la transición energética y el rol del gas natural en ese proceso, la importancia de la eficiencia energética y la transición justa.

Al respecto, Daniel Ridelener, director general de TGN explica que “las políticas macroeconómicas, orientadas a la estabilización permitieron una mejora en el clima de negocios y abrieron nuevas oportunidades de inversión, especialmente en infraestructura energética vinculada al desarrollo de Vaca Muerta”.

En este marco, el ejecutivo asegura que la transportadora avanzó en proyectos clave como la reversión de plantas compresoras y la construcción de tramos de gasoductos que forman parte del Gasoducto de Integración Federal, en colaboración con ENARSA.

Asimismo, dio un paso relevante con la creación de la sociedad Gasoducto Vicuñas S. A. U. , orientada a proveer gas natural para la industria minera del norte argentino

“Creemos que el desarrollo energético debe ir de la mano del respeto por las formas de vida de las comunidades locales en línea con los principios del Pacto Global y por eso hoy vemos cómo se han fortalecido los procesos de diálogo basados en la Debida Diligencia, que nos permite identificar riesgos emergentes y mejorar nuestras prácticas de operación”, agrega Ridelener.

Para el ejecutivo, el compromiso de TGN con la sustentabilidad “se expresa en cada acción que reportamos con vocación de cooperación y transparencia y así continuaremos para lograr que nuestras operaciones y proyectos converjan, haciendo que nuestros servicios sean cada día más seguros, confiables y sostenibles”.

Empresa resiliente

En el mismo sentido, TGN encaró un programa de medición de emisiones de gases de combustión en las chimeneas de las plantas compresoras, tanto en equipos compresores como generadores.

La empresa cuenta con equipamiento portátil específico que le permite realizar, además, el servicio a terceros.

La campaña anual de medición se realiza en “Invierno de Gas” y los resultados se presentan al ENARGAS mediante un protocolo específico.

Para Emilio Daneri, presidente del Directorio de TGN, estas medidas “demuestran que somos una empresa sustentable y resiliente que se construye, ante todo, sobre la innovación y el desarrollo del talento de las personas”.

TGN encaró un programa de medición de emisiones de gases de combustión en las chimeneas de las plantas compresoras.

Por eso recuerda que, durante el 2024, la compañía “redobló sus esfuerzos en consolidar una cultura organizacional que promueva el crecimiento profesional, el bienestar y la participación activa de sus equipos y aliados estratégico”.

Desde una perspectiva ambiental, Daneri destaca le liderazgo de TGN en los procesos de control y medición de emisiones en sus plantas compresoras a partir del análisis que realiza un equipo multidisciplinario “que también rediseña procesos para mejorar técnicas de operación y aplicar nuevas tecnologías destinadas a reducir emisiones con el propósito de crecer mediante la implementación de una estrategia que destaque a las personas en el centro de los procesos de desarrollo”.

De manera coincidente, Claudio Moreno, jefe de RSE de TGN, señala que “la empresa cumple un rol fundamental en el entramado energético del país y de la región ya que su actividad es vital para el abastecimiento, el desarrollo económico y el progreso de las comunidades donde operamos a ser un eslabón clave en la cadena de valor energética que nos obliga a estar siempre a la altura de los desafíos”.

Por eso, sostiene que en TGN se trabaja para fortalecer las prácticas, consolidar las ventajas competitivas, y estar a la altura de un mundo tan incierto como desafiante implementando tecnología para reducir las emisiones de metano y definiendo metas ambiciosas para alcanzar la neutralidad en el carbono en 2050.

Evaluar proveedores

Parte de ese compromiso es la verificación de la calidad de los productos y servicios y la necesidad de acotar el riesgo en las provisiones y sus contrataciones.

En ese marco, TGN dispone de procesos de evaluación de proveedores, inspección de materiales, inspección de obras y auditorías y, por último, la evaluación del desempeño a partir de los cuales se detectan oportunidades de mejora que son comunicadas al proveedor y se elaboran planes con ese fin.

Además, a través de la implementación de su Política de CSAS y su Sistema de Gestión Ambiental, TGN incorpora la protección ambiental en todas las etapas de su ciclo de vida.

Concretamente, durante el diseño de una nueva instalación, se seleccionan trazados y sitios de emplazamiento, con preferencia de aquellos que no presentan singularidades en materia de biodiversidad, es decir, evitando sitios de anidamiento, abrevaderos, sitios de alta densidad de flora y fauna, área de endemismos y/o con especies protegidas.

TGN dispone de procesos de evaluación de proveedores, inspección de materiales, inspección de obras y auditorías y, por último, la evaluación del desempeño.

Una vez seleccionado el lugar de emplazamiento de los proyectos, se realiza la Evaluación de Impactos Ambientales (EIA), que permite diseñar estrategias de conservación y planes de manejo, en el caso de que corresponda, para las etapas de construcción, operación y mantenimiento, y desafectación.

En todos los casos, se prioriza la conservación de hábitats y se promueve la convivencia armónica con la diversidad presente.

En cuanto a la gestión de residuos, se realiza priorizando la jerarquía ambiental de su manejo, considerando la minimización en origen, separación y clasificación, reutilización y reciclado, dentro de las posibilidades operativas y logísticas.

Los que se generan en las actividades de operación y mantenimiento del sistema se caracterizan en dos categorías: no peligrosos (que incluyen domiciliarios e inertes) y peligrosos (sólidos y líquidos, propios del mantenimiento).

Para el caso de los peligrosos, TGN cuenta con un proceso que considera el marco de la legislación nacional y leyes provinciales, e incluye su trazabilidad, transporte, tratamiento y disposición final a través de empresas habilitadas con el objetivo establecido de reducir un 5% versus el promedio móvil de cinco años anteriores.

Se trata de una estrategia de negocios que va alineada con los objetivos de sustentabilidad y que para Iván Hansen, director de Asuntos Públicos de TGN, “resulta clave para unificar criterios en la gestión, para entender y monitorear nuestro impacto desde lo social, económico y ambiental”.

Según su visión, “gestionar un negocio de manera sostenible es esencial ya que, como firmantes del Pacto Global desde su inicio en la Argentina, tenemos una premisa que es hacer de la sostenibilidad nuestro ADN”.

Hansen recuerda que con presencia en 17 provincias, TGN es responsable de mover a diario el 40% del gas natural, que representa el 20% de la matriz energética del país, “por lo cual y de forma independiente a cualquier contexto, en TGN la agenda de la sostenibilidad no se discute”.

Andrés Sanguinetti: Periodista especializado en negocios