Especialistas advierten: “La construcción puede convertirse en solución a la crisis climática”

Aunque las ciudades ocupan solo el 3% de la superficie del planeta, concentran a más del 60% de la población global (en Argentina a más del 90%), generan el 70% de las emisiones de gases de efecto invernadero y más del 70% de los residuos, según datos de la ONU. Y el sector inmobiliario, junto con la construcción y operación de edificios, consume el 37% de la energía global y produce casi el 40% de las emisiones de CO2.

Especialistas en construcción sustentable advierten: “El sector puede dejar de ser parte del problema y convertirse en la solución climática”,

El impacto del calentamiento global en las ciudades y el rol de los sistemas constructivos en la mitigación y adaptación a la crisis climática fueron los temas centrales de los “Diálogos Climáticos” (Climate Talks) organizados por la Embajada de Alemania en Buenos Aires el 17 y 18 de noviembre.

En ese marco -y mientras en Brasil se desarrolla la COP30, de Cambio Climático de la ONU, Economía Sustentable dialogó con la arquitecta Annette Hafner, especialista de la Universidad de Bochum en construcción con biomateriales y con el físico Hans Joachim Schellnhuber, experto en construcción regenerativa, y director del Instituto Internacional de Análisis de Sistemas Aplicados (IIASA).

Hans Joachim Schellnhuber, experto en construcción regenerativa, y Annette Hafner, especialista de la Universidad de Bochum en construcción con biomateriales.

Del encuentro participaron también especialistas del ámbito local y regional como la climatóloga Inés Camilloni, del Centro de Investigaciones del Mar y la Atmósfera de la UBA, Manuel Otero, director del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), Ricardo Bertolino, de la Red Argentina de Municipios para el Cambio Climático (RAMCC) y Malena Araneo, del banco de desarrollo regional Fonplata.

-¿Qué rol juega el sector de la construcción en la protección del clima y el desarrollo sostenible?

Hans Joachim Schellnhuber (H.J.S.): Tiene un rol esencial porque la actividad de la construcción es una de las principales generadoras de gases de efecto invernadero. Pero a diferencia de otros sectores como el transporte, que a lo sumo pueden compensar sus emisiones para llegar a la carbono neutralidad, la construcción puede capturar más CO2 del que libera a la atmósfera, pasando de ser parte del problema, a ser parte de la solución a la crisis climática.

Annette Hafne (A.H.): Así es. Y los materiales constructivos tienen una influencia importante. La construcción en madera permite almacenar carbono, requiere menos energía que los materiales convencionales, es más liviana y es energéticamente más eficiente. Actualmente se puede medir la captura de carbono, que equivale aproximadamente a un 50% del peso de la madera, y esto permitiría financiar los proyectos constructivos en el mercado de carbono.

La construcción en madera permite almacenar carbono.

-¿De qué hablamos cuando hablamos de construcción sustentable?

A.H.: Construcción sustentable significa eficiencia energética, adaptación a fenómenos climáticos extremos, reducción y captura de emisiones de gases de efecto invernadero. Y en este sentido, los biomateriales o materiales naturales como la madera son la mejor opción.

H.J.S.: El concepto de construcción sustentable y regenerativa tiene que ver con lo que propuso el Papa Francisco en su encíclica “Laudato Si”: no necesitamos estar rodeados de cemento, asfalto, vidrio y metal, sino que necesitamos más espacios verdes, y más contacto con la naturaleza. Estudios clínicos han demostrado que -más allá de la eficiencia energética y la captura de carbono-, las construcciones basadas en madera y materiales naturales son más saludables. Incluso se comprobó que reducen la presión arterial y mejoran la concentración y la sensación de bienestar.

«No hay límites de altura para la construcción en madera», sostiene Joachim Schellnhuber.

-¿Se pueden construir edificios completos con madera y biomateriales o hay limitaciones en la altura? ¿Y cuál es su costo, es más elevado que la construcción convencional?

H.J.S.: No hay límites de altura para la construcción en madera. Se pueden construir viviendas familiares o edificios públicos o de oficinas de varios pisos. Se puede usar bambú, que crece 40 metros en seis años. Y -siempre que se use madera de bosques reforestados- hay suficiente madera para construir viviendas para todos los habitantes del planeta. Tampoco hay limitaciones en el tiempo. En mi país, Alemania, hay edificios en madera que datan del siglo XVI o antes, y siguen en pie y funcionales.

A.H.: En cuanto al costo, debemos tomar en cuenta el ahorro energético que se genera al final del día. La evidencia muestra que es una solución sustentable también en lo económico. Y no solo es aplicable a viviendas familiares sino a también a edificios y urbanizaciones. Tenemos algunos ejemplos en Alemania, en la ciudad de Munich, de construcciones en madera revestidas con otros materiales.

-¿Cuáles son las limitaciones para extender este tipo de construcciones?

A.H.: Las mayores limitaciones pasan por la falta de conocimiento técnico sobre la construcción con madera y biomateriales, y también por una cuestión cultural. Muchas veces la construcción en madera es vista como anticuada, rústica o de menor calidad. Pero esto ha ido cambiando en los últimos años. De la mano de los diseñadores y arquitectos innovadores, se ha transformado en sinónimo de modernidad, diseño y sustentabilidad.

Las mayores limitaciones pasan por la falta de conocimiento técnico sobre la construcción con madera y biomateriales, aseguran.

J.H.S.: Muchas veces se asocia la construcción en madera o más tradicional con las zonas rurales, pero es una opción válida y eficiente para entornos urbanos también. Necesitamos volver a esos formatos tradicionales de construcción, que se hacen con los materiales de cada lugar, y están adaptados al clima y al entorno.

– ¿Qué potencial y qué oportunidades de cooperación ven en Argentina para la construcción sustentable?

A.H.: Creo que en Argentina hay un gran potencial para hacer una transición hacia la construcción y las urbanizaciones sustentables. Tanto por la abundancia de recursos naturales como por la capacitación de los profesionales, y en este sentido vemos buenas oportunidades de cooperación y transferencia tecnológica.

J.H.S.: Argentina tiene muchas hectáreas de bosques y puede ser muy competitiva en bioeconomía, pero no sólo exportando madera, sino generando toda la cadena de valor, con materiales de construcción y viviendas pre-fabricadas o para ensamblar que pueden exportarse. Y en cuanto a la demanda interna, creo que se necesitan regulaciones e incentivos para impulsar esta transición.

Gabriela Ensinck: Licenciada en Periodismo y Comunicaciones. Periodista especializada en ciencia, salud, ambiente y negocios. Trabajó en Editorial Perfil y el diario El Cronista. Colabora con medios gráficos, radiales y digitales en Argentina y la región. Integrante de la Red de Periodismo Científico (RADPC) y de la Sociedad de Periodistas Ambientales (SEJ). Autora de “Economía Verde, Innovación y Sustentabilidad en América latina” (Ed. Almaluz, 2020) y “Ser Sustentables. Guía para vivir en armonía con el planeta” (Urano, 2023).